Después del trágico asesinato del policía Leoncio Bermúdez en el Hospital Provincial de Rosario, el centro de salud permanece cerrado al público y bajo la custodia de la Gendarmería. Nueve gendarmes se encuentran en el lugar para garantizar la seguridad y las puertas del hospital están cerradas por decisión ministerial.
El personal del hospital había convocado a un paro de 48 horas la próxima semana en protesta por la falta de seguridad. Además, este jueves a las 10 de la mañana, los trabajadores de la salud de toda la ciudad se reunirán frente al hospital para realizar un "abrazo" simbólico como muestra de solidaridad y para exigir más medidas de seguridad.
El crimen de Bermúdez ocurrió cuando un grupo de sicarios ingresó al Hospital Provincial para buscar a un preso. Durante el intento de fuga, uno de los agresores disparó contra el policía, causándole la muerte. La conmoción por este trágico suceso ha llevado a un aumento en las medidas de seguridad y a la movilización de los trabajadores de la salud en busca de mejores condiciones para desempeñar sus funciones.