El presidente estadounidense, Donald Trump, encara la etapa más crítica de su gira asiática con un encuentro agendado con el líder chino Xi Jinping este jueves en la ciudad portuaria de Busán. El objetivo central es buscar una posible tregua en la guerra comercial EE.UU.-China. Trump se mostró confiado antes de la cita, asegurando: “Creo que vamos a tener un resultado muy bueno para nuestro país y para el mundo, la verdad”. La negociación se centra en un intercambio decisivo: la reducción de aranceles estadounidenses a cambio de que Pekín comprometa el freno a la exportación de precursores químicos del fentanilo, una droga de alta preocupación para Washington.
Negociación Arancelaria y el Fentanilo como Foco
La reunión entre Trump y Xi Jinping es vista como una oportunidad para destrabar la pulseada comercial. Según trascendió, Estados Unidos evalúa reducir a la mitad los gravámenes del 20% que siguen vigentes sobre bienes chinos. Esta medida sería la contrapartida por la cooperación de China en la lucha contra el fentanilo. El ministro de Exteriores chino expresó que el encuentro daría "un nuevo impulso al desarrollo de las relaciones EEUU-China" y afirmó que China está lista para colaborar en busca de “resultados favorables”.
Gestos de Distensión y Avances en los Mercados Globales
En paralelo a la cumbre presidencial, los negociadores de ambos países ya delinearon un marco para congelar el aumento de aranceles y los controles chinos a la exportación de tierras raras. Este avance en la guerra comercial hizo que las bolsas globales saltaran a máximos históricos, reflejando el optimismo del mercado. Como señal de buena voluntad, China retomó la compra de soja estadounidense, cuyas importaciones habían estado paralizadas durante meses, consolidando un gesto de distensión.
Éxito en Corea del Sur: Inversiones y Defensa
Horas antes de su llegada a Busán, Donald Trump estuvo en Corea del Sur, donde logró un acuerdo comercial que llevaba semanas estancado con el presidente surcoreano, Lee Jae-myung. El pacto incluye un compromiso de Seúl para invertir 350.000 millones de dólares en EE.UU., de los cuales 200.000 millones serán efectuados en efectivo, con un límite anual de 20.000 millones. El acuerdo se cerró después de una jornada de honores para Trump en Gyeongju, donde fue agasajado con la Gran Orden de Mugunghwa y una réplica de una corona dorada de una antigua dinastía. Además, el líder surcoreano prometió aumentar el gasto militar, cumpliendo una de las demandas clave de Washington en materia de defensa.
Contexto Regional: Tensión con Corea del Norte
La visita de Trump a la región se produjo poco después de que Corea del Norte lanzara un misil de crucero con capacidad nuclear. Sin embargo, el presidente republicano minimizó el hecho, manteniendo el foco en las negociaciones comerciales y el futuro de la región. La cumbre con Xi Jinping es la última y más decisiva parada de su viaje por Asia, buscando avances concretos en la economía global, mientras persisten las tensiones con Pyongyang y la situación de Taiwán sigue marcando el pulso geopolítico.
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