Rosario en Crisis: Juicios, Balaceras y Robos Marcan una Jornada de Violencia

En una jornada marcada por múltiples incidentes delictivos, Rosario y sus alrededores han sido el escenario de acontecimientos que evidencian la persistente problemática de la violencia y el crimen organizado. Se han sucedido hechos que van desde el juicio a la trapera rosarina Brenda Leguizamón, conocida artísticamente como Bren Legui, por narcomenudeo, hasta ataques armados y robos con rastreo GPS, generando una ola de preocupación en la opinión pública.

La primera noticia se centra en el proceso judicial de Bren Legui y de la banda a la que pertenece, identificada como Las Diablas. 

La acusada, detenida desde abril de 2023 tras allanamientos en localidades bonaerenses y en Rosario, enfrenta cargos por integrar una organización dedicada a la venta de estupefacientes, que operaba desde Rosario y se extendía hasta San Nicolás de Los Arroyos. La fiscal Verónica Marcantonio expuso que la pesquisa, llevada a cabo entre diciembre de 2022 y abril de 2023, involucró a 12 personas que “todos socios en la actividad ilícita, comercializaron estupefacientes, vendían cocaína y marihuana con habitualidad y ánimo de lucro”.

 La acusación sostiene que la banda actuaba “mediante división de tareas y de manera organizada, en dosis destinadas directamente al consumidor, llevadas a los domicilios de los compradores bajo la modalidad de delivery”, abasteciéndose de drogas desde Rosario.

Además, el entramado delictivo se vincula con hechos del pasado, cuando la familia Leguizamón acaparó la atención policial tras la celebración de la boda narco en Ybarlucea, realizada en enero de 2022, cuyo desenlace fue trágico: en el marco de ese casamiento, protagonizado por Brisa Leguizamón y Estebán "Pinky" Rocha –ambos investigados por narcotráfico– se produjo un triple crimen que cobró la vida del narco Iván Giménez, su pareja Erica Vanesa Romero y su hija de un año. 

Luego de la emboscada a balazos a la salida del evento, Leguizamón y Rocha lograron evadir a las autoridades hasta su captura un año después en Asunción, Paraguay, tras ser localizados por Interpol en un edificio de la capital paraguaya. La audiencia preliminar, realizada en los tribunales nicoleños, contó con la presencia de otros acusados, entre ellos los hermanos Ignacio Augusto Leguizamón, Nadin Nicol Albornoz, Brenda Daniela Leguizamón, Leandro Marcatelli, Jeremías Rueda, Juan Edgardo Casco, Brian Nacura, Alberto Bogado, Carlos Ávila, Patricia Gómez, María Guerra y Héctor Antune, siendo la mayoría juzgados con la participación de un jurado popular.

En otro suceso, ocurrido el pasado sábado en el barrio La Cerámica, una nena de 8 años, identificada como Tiziana G., fue baleada en el brazo derecho durante un ataque contra la vivienda de su tía. 

Cerca de las 2 de la tarde, en Cruz Chica y República de Irak, la pequeña quedó en medio de una balacera ejecutada desde una moto, en el marco de un conflicto familiar por la tenencia de una hija. La tía de la víctima afirmó haber reconocido al autor de los disparos como su ex pareja, quien, horas antes, había amenazado con “balear” la vivienda. El agresor llegó a bordo de una Honda Wave roja acompañado de otra persona aún no identificada, y la niña fue trasladada al Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, donde se confirmó la herida en su brazo derecho. La investigación inicial quedó a cargo de la Unidad de Flagrancia.

La jornada también tuvo su cuota de violencia extrema en el microcentro de Rosario. El pasado 29 de enero, en Pasaje Araya al 900, Marcelo Daniel R., un hombre de 33 años en situación de calle, fue detenido tras agredir brutalmente a un hombre de 72 años. Según el relato de la fiscalía, el hecho se desencadenó cuando Marcelo R. ingresó a un garaje acompañado por Ricardo C., quien desconocía las intenciones violentas y delictivas que el imputado tenía premeditadas. 

Durante la agresión, el sospechoso propinó golpes de puño y continuó con patadas en la cabeza y otras zonas del cuerpo, asegurando así dejarlo en un estado de vulnerabilidad, para luego abusar sexualmente de la víctima sin que ésta pudiera dar su consentimiento. Luego de volver a golpear a la víctima, el agresor abandonó el lugar, dejando al hombre inconsciente en la vía pública, donde permaneció por varias horas hasta ser descubierto por vecinos y trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). Marcelo R. fue imputado por abuso sexual con acceso carnal agravado, y se le dictó prisión preventiva por hasta dos años.

El operativo contra el crimen organizado se extendió también a delitos contra la propiedad. Un empleado de Aguas Santafesinas SA denunció el robo de una camioneta utilitaria, una Peugeot Partner, que ocurrió en barrio Belgrano mientras el conductor se encontraba en servicio. 

El ladrón, aprovechándose de que la llave de encendido había quedado puesta, no advirtió que el vehículo contaba con GPS, lo que permitió a las autoridades rastrearlo. El robo, iniciado alrededor de las 14:00, culminó en un lavadero de la avenida Pellegrini al 4800, cuando los efectivos, basándose en la información del sistema de rastreo satelital, localizaron el utilitario en una cochera de Carriego al 1400. Durante el operativo, el principal sospechoso fue detenido y, tras los peritajes pertinentes, se ordenó la devolución del vehículo, mientras que el hermano del detenido quedó demorado preventivamente.

Por último, en la zona oeste de la ciudad, la violencia armada volvió a hacerse presente en un ataque contra una vivienda ubicada en el cruce de Bolivia y La Paz, ocurrido alrededor de las 20:30 horas del lunes.

 Los efectivos del Comando Radioeléctrico confirmaron que la casa sufrió tres impactos de bala en el portón del garaje y otro contra un auto estacionado en el ingreso. Las imágenes de las cámaras de vigilancia permitieron identificar a dos hombres en moto, uno de ellos vestido con remera negra y el otro con remera blanca, quienes tras realizar disparos al aire huyeron por Viamonte y luego tomaron por Provincias Unidas hacia el sur. Aunque no se registraron heridos y no se encontraron armas en poder de los detenidos, quienes fueron derivado a la seccional 32ª, la acción ha sumado otro capítulo en la espiral de violencia que afecta a la ciudad.

Cada uno de estos incidentes, que se suceden en cuestión de horas, conforma un complejo escenario de inseguridad en el que las actividades delictivas, desde el crimen organizado y la violencia callejera hasta agresiones brutales y robos tecnológicos, mantienen a Rosario y sus alrededores en un estado de alerta constante. Las investigaciones continúan en cada caso, mientras la ciudadanía exige respuestas y acciones contundentes por parte de las autoridades para restaurar la tranquilidad en la región.