La UOM de Villa Constitución convocó a un paro y logró revertir los despidos en Acindar.
Tras un paro de varias horas en la planta de Villa Constitución, la empresa siderúrgica Acindar decidió dar marcha atrás con la decisión de despedir a 70 empleados. La tensión surgió luego de que la compañía sancionara a trabajadores por participar en asambleas y medidas gremiales, en un contexto marcado por la caída de la producción y la implementación de un régimen de suspensiones en los últimos meses.
“La intención de despedir a compañeros por cuestiones disciplinarias marca un cambio de actitud de la empresa, quisieron amedrentar a los trabajadores luego del paro de once días que se realizó a fin de año, pero como siempre la reacción fue unánime, se paró toda la planta y la empresa dio marcha atrás,” señaló Pablo González, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Villa Constitución.
Los despidos se concentraron en el área de trefilado, pero los trabajadores de toda la planta se solidarizaron y paralizaron la producción hasta lograr la reversión de la medida.
El conflicto se da en el marco de una difícil situación para la industria siderúrgica, que sufrió paradas prolongadas debido a la caída del mercado y la paralización de la obra pública. En los últimos meses, la planta operó bajo un régimen de suspensiones con salarios reducidos.
Según la UOM, Acindar busca extender este esquema hasta fin de mes, pero con mayores bajas salariales. Además, la empresa continúa buscando modificaciones en las condiciones laborales y ajustes en los costos, lo que ha generado fuertes tensiones con el gremio.
El conflicto laboral en Villa Constitución se suma a otras disputas en el sector agroexportador y frigorífico, lo que añade incertidumbre al arranque de 2025 para los trabajadores de la región.