A medida que el Museo de la Memoria de Rosario se prepara para conmemorar el 50° aniversario del último golpe militar en Argentina, las renovaciones y proyectos buscan mantener viva la memoria histórica y expandir su alcance. “Buscamos desarmar las herencias del genocidio”, afirma Lucas Massuco, director del Museo, quien lidera esta transformación.
Ubicado en la emblemática esquina de Moreno y Córdoba, el Museo, que funcionó como sede del Comando II Cuerpo del Ejército, está en proceso de renovación completa de sus pisos, incorporando nuevas propuestas y ampliando su público. “El museo busca generar conciencia y memoria respecto del pasado reciente pero también desarmar lo que hizo el genocidio, como el egoísmo, la despolitización y la mercantilización de los vínculos”, señala Massuco.
Proyectos en marcha
En diciembre de 2024 se inició la transformación del espacio "Justicia Perseguirás", un lugar icónico que desde 2018 exponía un collage de Javier Armentano y una videoinstalación de Pablo Romano. Este espacio ahora albergará propuestas transitorias que reflejan conquistas y luchas recientes. La primera intervención estuvo a cargo de Réplica – Colectiva Gráfica, docentes de la Licenciatura en Diseño Gráfico de la UNR, quienes desarrollaron un mural relacionado con la democratización de la educación.
En marzo de 2025, se inaugurará una sala dedicada a las infancias con un enfoque en derechos humanos. “Nos interesa pensar en esa generación de niñas y niños que vivió un genocidio y reflexionar sobre qué infancia estamos formando para el futuro”, explica Massuco. Este espacio intergeneracional estará vinculado con el trabajo del Instituto Auschwitz en el marco del Proyecto Palabras Semilla.
Otra innovación clave será la integración de arte contemporáneo con archivos históricos, creando experiencias que combinen evocación y transmisión del mensaje sobre el genocidio en Argentina. “La memoria es un proceso vivo, no se paraliza ni se sintetiza de una vez y para siempre”, destaca Massuco.
Además, el Museo reforzará su rol como custodio de archivos al crear una mediateca con documentos, bibliografía y archivos orales, profundizando su compromiso con la preservación histórica.
Contexto desafiante
El 50° aniversario se da en un contexto nacional marcado por un retroceso en políticas públicas de memoria y un cuestionamiento a los derechos humanos en democracia. “El contexto global es de acechanza al paradigma de derechos humanos”, alerta Massuco. A pesar de ello, el Museo avanza con una agenda diversa que incluye docentes, estudiantes, artistas y turistas, consolidándose como un espacio clave para la memoria colectiva.
En 2023, las visitas al Museo crecieron más del 10%, con un incremento significativo durante los fines de semana debido al turismo interno. De cara a 2025, el objetivo es reforzar esta tendencia, ampliando su impacto y conectando con los derechos humanos del presente.
El Museo de la Memoria, parte de la Coalición Internacional de Sitios de Memoria y de la Red Latinoamericana, continúa siendo un referente en la lucha por el “Nunca Más” en Argentina.