Tras recientes operativos en Rosario, donde la policía solicitó identificación a estudiantes de la escuela Gurruchaga, el ministro de Seguridad de Santa Fe, Pablo Cococcioni, recomendó que los menores de edad lleven siempre su Documento Nacional de Identidad (DNI) u otra identificación cuando salgan a la vía pública. Esta recomendación surgió luego de que familiares de los alumnos denunciaron que agentes policiales advirtieron sobre posibles demoras si no contaban con el documento.
Cococcioni explicó que “el sistema que vamos a utilizar es exactamente el mismo” en toda la provincia, y afirmó que esta modalidad no contraviene ni la Constitución ni las leyes de Santa Fe. “La policía tiene facultad para parar y pedir identificación, y cuando hay actitud sospechosa o resistencia a ser identificado, tiene la capacidad de llevar a la persona a una dependencia policial por un máximo de seis horas para averiguar antecedentes”, detalló el ministro.
El funcionario también defendió el operativo policial cerca de la escuela Gurruchaga, justificando el accionar de las fuerzas de seguridad. Según Cococcioni, las estadísticas respaldan estos métodos, ya que “de cada siete personas detenidas para averiguación, una tenía antecedentes”. En su opinión, esta cifra demuestra que el trabajo policial no es arbitrario ni molesta a ciudadanos sin motivo.
A pesar de las justificaciones oficiales, este tipo de controles ha generado críticas y señalamientos, con sectores que califican la medida como “una faceta más de una política de seguridad caracterizada por torturas y malos tratos”.
