Carlos Quintana, figura central e inamovible en la zaga de Rosario Central bajo la dirección de Ariel Holan y sus predecesores, protagonizó uno de sus encuentros más destacados el pasado sábado en el Gigante. Su trascendencia no se limitó al gol agónico que allanó el camino hacia el triunfo frente a Estudiantes, sino que abarcó una actuación defensiva impecable. Una vez más, Quintana demostró su valía en ambas áreas del campo, protegiendo su propia portería y generando peligro en la rival, una costumbre que ha cultivado desde su llegada al club en diciembre de 2022.
A sus 35 años, el defensor se consolidó rápidamente en el equipo, ganándose el respeto y el afecto de la hinchada canalla tras un breve período de adaptación. Los argumentos que respaldan su importancia en las dos áreas son numerosos, siendo el último partido contra Estudiantes un ejemplo elocuente. En dicho encuentro, no solo neutralizó eficazmente al delantero Guido Carrillo, sino que también evitó un gol rival sobre la línea, instantes antes de conectar un cabezazo certero que vulneró la portería de Mansilla.
Quintana y la estrategia de la pelota parada
Un número significativo de los siete goles convertidos por Quintana han llegado a través de centros en jugadas de balón detenido, la mayoría ejecutados por Ignacio Malcorra, lo que sugiere una conexión y entendimiento futbolístico notables entre ambos jugadores. Más allá de este detalle, resalta la ventaja que el defensor suele obtener en el área contraria.
Pocos defensores tienen la frecuencia goleadora de Quintana, quien ha marcado siete tantos con la camiseta de Central: cinco de cabeza, uno de penal y el restante mediante una jugada elaborada. Varios de estos goles han sido cruciales, como el reciente ante Estudiantes, que impulsó la clasificación a los cuartos de final de la Copa Argentina.
Su influencia trasciende la mera anotación; también se manifiesta en su capacidad para habilitar a sus compañeros. El recuerdo fresco en la memoria de los aficionados es su destacada participación en el clásico rosarino ganado 2-1 en el Parque Independencia, donde sus dos cabezazos se convirtieron en asistencias clave.
Un asistidor "clásico"
Si bien Quintana no marcó en el último clásico, su contribución fue fundamental. En el primer gol, un córner ejecutado por Malcorra encontró la cabeza de Quintana en el corazón del área "leprosa", desviando la trayectoria del balón hacia el segundo palo, donde Gaspar Duarte apareció para definir con la pierna derecha.
En la segunda asistencia, tras un tiro libre de Malcorra, Quintana se impuso en el juego aéreo para enviar el balón al centro, donde Jaminton Campaz cabeceó al gol.
Otro partido trascendental en el que Quintana dejó su huella goleadora fue el debut de Central en la Copa Libertadores del año pasado, con un triunfo 1-0 sobre Peñarol en el Gigante, aunque en esa ocasión el gol fue producto de una jugada.
El registro goleador del central canalla
Además de los goles ante Peñarol y Estudiantes, Quintana ha marcado contra Atlético Tucumán (de penal) en la Liga Profesional 2023, Defensa y Justicia (de cabeza) en el mismo torneo, Gimnasia (de cabeza) en la Liga Profesional 2024, Defensa y Justicia nuevamente (de cabeza) también en la Liga Profesional 2024, e Independiente Rivadavia (de cabeza) en el mismo certamen. Aunque no anotó en el último clásico, su participación fue determinante.
Si bien el gol no es su principal función, Quintana también aporta en ataque. Su fuerte reside en la marca y la solidez defensiva, cualidades por las que fue incorporado por Miguel Ángel Russo al inicio de su ciclo en Central, siendo el primer refuerzo en llegar. Desde entonces, y bajo diferentes entrenadores, Quintana ha sido un pilar constante en el equipo.
A sus 37 años, se mantiene como titular indiscutido, y la hinchada canalla le profesa un enorme respeto, un reconocimiento merecido por su entrega y rendimiento dentro del campo de juego.
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