La alarma por el fentanilo contaminado se intensifica en Argentina. La Justicia Federal ha identificado un segundo lote del potente opioide, el número 31244, elaborado por la firma HLB Pharma en los Laboratorios Ramallo, que estaría comprometido. Este nuevo hallazgo se suma al lote 31202, previamente vinculado a graves infecciones hospitalarias que ya han provocado 34 muertes confirmadas a nivel nacional, 15 de ellas en Rosario y una en Santa Fe capital, aunque las autoridades no descartan que la cifra de víctimas pueda ser mayor.
El juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, ha emitido una orden urgente a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) para la localización, retiro y preservación inmediata de todas las ampollas del lote 31244, con la advertencia de posibles acciones judiciales si no se cumple. La medida busca asegurar la recuperación de todas las unidades de ambos lotes implicados, que se presume están contaminados con las bacterias Ralstonia pickettii y Klebsiella pneumoniae. Estos microorganismos, ajenos al ambiente intrahospitalario, provocan enfermedades graves como neumonía y exhiben resistencia a tratamientos convencionales.
La Justicia ha solicitado a Anmat que se contacte con todas las droguerías registradas en el país para que informen sobre la adquisición y distribución de las ampollas de los lotes 31202 y 31244 de Fentanilo HLB Pharma, con el objetivo de su recuperación inmediata y resguardo judicial bajo estrictas condiciones de seguridad.
Además, se ha instado a los Ministerios de Salud de todas las provincias y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a recabar información urgente sobre pacientes que hayan sido internados desde el 1 de abril y presenten infecciones con las bacterias mencionadas, indicando si se les administró fentanilo, su marca comercial y número de lote. La División de Delitos contra la Salud Pública de la Policía Federal Argentina (PFA) ha sido autorizada a llevar adelante inspecciones, incautaciones y resguardo de los productos.
Escala de la Crisis Sanitaria y Origen de la Alerta
El último Boletín Epidemiológico Nacional Nº 757 confirma 69 casos de infecciones y 33 muertes a nivel país, cifras que ascienden a 34 fallecidos con la inclusión de una nueva víctima fatal en el hospital público de Balcarce. Santa Fe sigue siendo la provincia con el mayor número de complicaciones reportadas. El grupo más afectado son pacientes de sexo masculino, con una edad media de 57 años (entre 45 y 64 años), quienes recibieron el medicamento mientras estaban en cuidados intensivos, resultando en infecciones fatales. En la mayoría de los casos, la mediana entre la administración del fentanilo contaminado y el fallecimiento fue de 12 días.
La preocupación es que el número de víctimas podría ser aún mayor, ya que no todas las clínicas y hospitales del país habrían denunciado o registrado muertes por estas bacterias, que no suelen ser contraídas durante internaciones y generan resistencia a los antibióticos.
La alerta inicial la dio el Hospital Italiano de La Plata a mediados de abril, al descubrir que las ampollas de fentanilo de HLB Pharma contenían estas peligrosas bacterias. Tras ello, Anmat prohibió el uso, comercialización y distribución del lote en cuestión y clausuró las firmas involucradas: HLB Pharma y su laboratorio coproductor, Laboratorios Ramallo.
La Investigación Judicial y un Sospechoso Robo
El juez Kreplak lidera la investigación para determinar las responsabilidades de HLB Pharma. En este marco, se realizaron allanamientos, incluyendo a la droguería rosarina Nueva Era, que actuó como distribuidora comercial de parte del lote contaminado.
Un punto crucial en la investigación es la denuncia de un presunto sabotaje o robo en las oficinas de HLB Pharma, ocurrida el 11 de mayo, apenas dos días antes de que Anmat emitiera la alerta por el fentanilo contaminado y cuatro días antes de los allanamientos judiciales. Según fuentes policiales y judiciales, un empleado de seguridad reportó un acto de vandalismo y robo en la oficina de Garantía de Calidad de la firma en San Isidro, donde se destruyeron documentos clave relacionados con los procedimientos de fabricación y desaparecieron los registros de cámaras de seguridad que cubrían semanas de movimientos dentro del laboratorio. Este hecho, que no había avanzado judicialmente, ha cobrado una nueva relevancia en el contexto de la investigación actual.
📝 ¡Gracias por tu lectura!
Tu feedback no solo mejora el contenido, sino que también inspira a otros lectores.
📝 ¡Gracias por tu lectura!
Tu feedback no solo mejora el contenido, sino que también inspira a otros lectores.