Como parte de su formación práctica, el gobierno provincial desplegó a 1100 agentes recién egresados del Instituto de Seguridad Pública de Santa Fe (Isep) en las calles de Rosario. Durante un año, estos efectivos cumplirán funciones como caminantes de la Brigada de Orden Urbano (BOU), adquiriendo experiencia en operativos de seguridad.
Mientras esperan la entrega de sus uniformes de fajina, los nuevos agentes patrullan con una vestimenta clásica: camisa celeste, pantalón azul, zapatos y gorra, un atuendo que algunos asociaron con la Policía Federal de otras épocas. Sin embargo, desde el viernes pasado comenzó la distribución de los uniformes reglamentarios, adecuados para el trabajo en la vía pública.
Un proceso de adaptación en las calles de Rosario
Estos policías comenzaron a prestar servicio el 1 de marzo, luego de su egreso en diciembre. Según explicó Omar Pereira, secretario de Seguridad Pública de Santa Fe, todos los nuevos efectivos deben cumplir un período de adaptación en Rosario. Antes, estos agentes rotaban por comisarías, pero la creación de superestaciones policiales llevó a que se asignen directamente al BOU para patrullar en grupos y ganar experiencia.
La estrategia provincial busca que los agentes trabajen primero en equipos de tres a cinco efectivos, acompañados por compañeros con más experiencia. Con el tiempo, la idea es reducir el número a dos por patrulla para operar de manera más autónoma en zonas estratégicas de la ciudad.
"Aportan en operativos nocturnos sobre el transporte público, patrullajes en bulevar Oroño, Laprida, las peatonales Córdoba y San Martín, zonas comerciales y puntos críticos de los barrios. También brindaron custodia en estaciones de servicio durante momentos críticos de seguridad", detalló Pereira.
Experiencia y evaluación rigurosa
El objetivo de este proceso es que los nuevos agentes se familiaricen con la dinámica de la ciudad e interactúen con la comunidad. Se les instruye para dialogar con vecinos, presentarse en comercios y estar a disposición del público.
El período de adaptación dura un año, con turnos iniciales de ocho horas que luego se extienden a guardias de 12 horas con 36 de descanso. A los seis meses, se realiza una evaluación para determinar si cada agente está apto para continuar en la fuerza. "Si detectamos problemas de conducta, ausencias reiteradas o cuestiones psicológicas o de adicciones no manifestadas previamente, esa persona es apartada", advirtió Pereira. En la promoción anterior, solo 12 efectivos fueron separados del servicio.
El funcionario también reconoció que al asumir la gestión se encontraron con deficiencias en la formación de los nuevos agentes, en parte debido a la diversificación del Isep en distintas localidades como Reconquista, Rafaela y Murphy. "Reforzamos su último año de formación y sumamos dos semanas adicionales para completar conocimientos clave", indicó.
Distribución y futuro de los agentes
Finalizada la etapa de adaptación, los agentes serán destinados a distintas unidades regionales de la provincia. La semana pasada, 190 efectivos fueron asignados a la Unidad Regional I (La Capital), mientras que otros se trasladaron a Rafaela, Venado Tuerto y San Lorenzo. Sin embargo, la mayoría de los 940 egresados de la promoción 2023 permanecerá en Rosario, dada la crisis de seguridad que atraviesa la ciudad.
"El 90% de los que estudian en Rosario provienen del norte de la provincia, y muchos no son de la ciudad. Por eso permitimos traslados, priorizando agentes con más de cinco años de servicio que quieran regresar a sus localidades de origen", explicó Pereira.
El uniforme: entre la demora y la polémica
El gobierno provincial descartó cualquier intención de remitir a vestimentas de otras épocas y atribuyó la demora en la entrega del uniforme reglamentario a problemas de logística con las empresas proveedoras. "El proceso de distribución comenzó el viernes y se completará en los próximos 60 a 90 días", aseguraron.
Hasta hace algunos años, los agentes recibían un suplemento salarial para la compra del uniforme, pero la crisis económica llevó a que muchos destinaran ese dinero a otros gastos. En 2017, el gobierno realizó una provisión masiva de uniformes, algo que no se repitió en la gestión 2019-2023. "Nos encontramos con que los policías seguían usando los mismos uniformes que les habíamos dado nosotros. Ahora estamos asegurando la entrega completa para la promoción 2024 y luego para el resto de las unidades regionales", concluyó Pereira.
📝 ¡Gracias por tu lectura!
Tu feedback no solo mejora el contenido, sino que también inspira a otros lectores.
📝 ¡Gracias por tu lectura!
Tu feedback no solo mejora el contenido, sino que también inspira a otros lectores.