El regreso escolar este miércoles no fue uno más para los alumnos del turno tarde del Instituto Provincial de Educación Media y Técnica 357, en el corazón del barrio Smata, Córdoba. En señal de luto, la bandera argentina ondeó a media asta en homenaje a Agustina García, la adolescente de 16 años que perdió la vida el pasado 21 de enero en un trágico accidente en la ciudad de Rosario. Su partida dejó una huella profunda en sus compañeros y profesores, quienes, vestidos de negro, recordaron a la joven, quien se destacó por su bondad, esfuerzo y amor por aprender.
Aquel 21 de enero, la familia García, originaria de Córdoba, había llegado a Rosario para pasar el día. Mientras paseaban por la costa central y aguardaban para cruzar en la intersección de Presidente Roca y Wheelwright, un Peugeot 206 a más de 120 km/h los atropelló. Agustina y su madre, Tania, murieron al instante. Su padre y hermana pequeña sobrevivieron milagrosamente al choque. El conductor del vehículo, Agustín López Gagliasso, de 20 años, se encuentra detenido a la espera del juicio.
El impacto de esta tragedia sigue siendo sentido tanto en Rosario como en Córdoba, donde se han realizado marchas pidiendo justicia por Agustina y su madre.
Un homenaje a Agustina en su colegio
Este miércoles, a las 13:10, los estudiantes del IPEMyT "José Campellone" formaron en el patio del colegio, con la bandera a media asta. La directora del establecimiento, Alejandra Fontanella Brito, expresó: "Hoy tenemos nuestra bandera a media asta por lo que ocurrió aquel 21 de enero en Rosario. Ese día perdimos a una persona muy importante para nosotros, una compañera de ustedes, nuestra primera escolta. Agustina García era una joven llena de sueños, de alegría y vida. Su sonrisa iluminaba los pasillos de nuestra escuela y su presencia nos recordaba lo importante que es valorar cada momento y cada amigo y oportunidad."
La comunidad educativa resolvió rendir homenaje a Agustina estableciendo una distinción en su nombre, que será otorgada a los estudiantes destacados por su predisposición al estudio y compañerismo.
Un recuerdo imborrable
Federico Amuchástegui, docente del IPEMyT, recordó a Agustina como una estudiante comprometida, sociable y con un gran espíritu de trabajo. "Se destacaba por su inquietud para aprender y su vida social dentro de la escuela. Se relacionaba con los compañeros de su curso y otros. Participaba activamente en el parlamento juvenil y en el centro de estudiantes," dijo el profesor, conmovido por la pérdida.
El impacto de la tragedia también se reflejó en los alumnos, quienes este miércoles, en señal de luto, vistieron sus uniformes con prendas negras. "Fue una jornada especial. Un docente muy cercano a la familia lo vivió muy de cerca y fue movilizante para toda la comunidad educativa," agregó Amuchástegui, quien también destacó que muchos profesores comenzarán a implementar proyectos de educación vial.
Un homenaje eterno
En los próximos días, la promoción de sexto año recibirá sus buzos de egresados, y se hará un recordatorio de Agustina con una remera de la promoción 2025, la cual será enmarcada con alas y su nombre. "Agus está y estará presente y acompañará por el resto de sus vidas a los chicos que la conocieron," concluyó el docente, resaltando la huella imborrable que dejó Agustina en todos los que tuvieron el honor de conocerla.
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