La conocida tormenta de Santa Rosa, que suele manifestarse a finales de agosto, se está gestando debido a la interacción entre la retirada de la ola polar y la llegada de una corriente cálida y húmeda. Este cambio en las condiciones meteorológicas podría culminar en una perturbación atmosférica con tormentas y chaparrones durante el fin de semana.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) no ha definido si el fenómeno ocurrirá el viernes 30 o el sábado 31, pero ha advertido sobre la posibilidad de que caiga "graupel" (o agua nieve) en algunas zonas del país. Este tipo de precipitación, menos dura que el granizo, podría presentarse acompañada de actividad eléctrica en provincias como Buenos Aires, Santa Fe, San Juan, San Luis, Mendoza, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Corrientes y Entre Ríos.
Los últimos modelos de pronóstico indican que las provincias con mayor probabilidad de lluvias y tormentas son Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe y el sudeste de Córdoba. Por lo tanto, se recomienda estar preparados con paraguas e impermeables, ya que se espera una "tormenta bisagra" que marcará la transición del invierno a la primavera.
El graupel se formaría debido al congelamiento de gotas de agua en un entorno donde la temperatura es inferior a los 0°C, lo que anuncia un fin de semana frío. El SMN ha analizado 117 años de datos de precipitaciones en Buenos Aires, y ha encontrado que en 66 ocasiones hubo lluvias dentro de los cinco días alrededor del 30 de agosto, lo que da una probabilidad del 56,41% de lluvias en estas fechas.
Para el sábado, se pronostica un cielo parcialmente nublado, con vientos del sur y temperaturas que oscilarán entre los 5 y 12 grados, con posibilidad de chaparrones durante la tarde. El domingo, en cambio, se espera un clima nublado, pero sin lluvias, con una mínima de 4 grados y una máxima de 13 grados.
La tormenta de Santa Rosa, aunque se asocia principalmente con leyendas y mitos en Argentina, es un fenómeno que refleja un cambio en los patrones de circulación atmosférica, con un mayor ingreso de humedad desde el norte del país y un aumento de las temperaturas. Su nombre proviene de Santa Rosa de Lima, la patrona de Perú y América, a quien se atribuye el milagro de haber protegido a Lima de un ataque de piratas holandeses en el siglo XVII.
Aunque el Día de Santa Rosa de Lima se celebra el 23 de agosto, en algunos lugares se mantiene la tradición de conmemorarla el 30 de agosto, una fecha establecida tras su canonización, aunque fue modificada en 1969 por el Concilio Vaticano II para acercarla al aniversario de su fallecimiento.
Este año, 2024, los meteorólogos han detectado un patrón de circulación que podría traer inestabilidad a varias regiones del país. Durante toda la semana se espera un viento del norte cálido que elevará la temperatura y la humedad en las capas bajas de la atmósfera, preparando el escenario para la tormenta hacia el final de la semana.