En una medida que marca un cambio significativo en la dinámica del microcentro santafesino, la Municipalidad de Santa Fe ha iniciado el retiro de los cuidacoches de las calles, en consonancia con una ordenanza municipal recientemente implementada. Esta acción impide que los trabajadores informales continúen desempeñando su labor, al menos en las zonas donde opera el estacionamiento medido. Desde el gobierno local, consideran esta intervención como un paso positivo en el ordenamiento urbano.
Mientras que en Rosario persiste la problemática de la presencia extendida de cuidacoches, muchos de ellos involucrados en incidentes violentos, en Santa Fe se ha promulgado una ordenanza que regula esta actividad callejera, prohibiendo específicamente las tareas de cuidado y limpieza de vehículos en el espacio público.
El proyecto, propuesto por el intendente Juan Pablo Poletti y aprobado por el Concejo Municipal, establece consecuencias para aquellos que violen la restricción, quedando sujetos a las disposiciones del Código de Infracciones municipal y del Código de Faltas provincial y sus modificaciones correspondientes.
En declaraciones a De 12 a 14 (El Tres) el viernes, Sebastián Mastropaolo, secretario de Gobierno y Control de la Municipalidad de Santa Fe, informó sobre la ejecución de "operativos muy intensos" llevados a cabo por agentes de tránsito y control, focalizados en la zona de estacionamiento medido como primer paso.
Mastropaolo resaltó la colaboración entre la Policía y los agentes municipales en esta tarea, describiéndola como un cambio de paradigma que ha sido recibido positivamente por la comunidad.
La Municipalidad ha dispuesto medidas alternativas para los cuidacoches registrados antes de la promulgación de la ordenanza. "Aunque algunos han mostrado resistencia, se les ha explicado claramente la normativa que prohíbe su actividad, aclarando situaciones ambiguas que existían previamente", comentó el funcionario, quien también advirtió que, tras la tercera notificación, "la fuerza pública puede intervenir".
No obstante, destacó que "muchos han optado por abandonar la actividad y liberar el espacio público", evidenciando la efectividad de la medida en la redistribución del uso del espacio urbano.
