
En los mensajes encontrados en los lugares de los ataques, se hace referencia a la "banda del 9" y se atribuyen los actos al pabellón 9 de "Pinolandia". Sin embargo, la incertidumbre persiste sobre si estos mensajes son una autoconfesión por parte de la banda o una operación de falsa bandera para perjudicar a un sector antagónico.
Este pabellón ya había estado bajo la lupa recientemente, cuando fue allanado como respuesta al crimen del policía Leoncio Bermúdez en el Hospital Provincial. Durante el allanamiento, se encontraron indicios de actividades ilícitas, incluyendo un "búnker de drogas" con cocaína y cannabis prensado.
En un comunicado lanzado al cajero del Banco Macro, la "banda del 9" se atribuyó el crimen del policía Bermúdez y amenazó con consecuencias fatales para la familia del gobernador Maximiliano Pullaro si no dejaba de "meterse" con los internos.
En respuesta a estos eventos, se han desplegado medidas de seguridad intensivas, incluyendo allanamientos dirigidos por la Policía de Investigaciones. Un total de 46 allanamientos se están llevando a cabo en Rosario, Villa Gobernador Gálvez, y Pueblo Esther, en busca de pistas relacionadas con los ataques y amenazas al gobernador Pullaro.

El ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni, ha señalado que estos actos son una reacción previsible a los cambios en las políticas penitenciarias implementadas por el nuevo gobierno. La investigación se centra en dos hipótesis: un preso recientemente trasladado busca revertir la decisión mediante la planificación de balaceras, o reclusos de otros pabellones intentan perjudicar a los del pabellón 9 tras la reubicación de internos.
En medio de la tensión, se espera que las autoridades refuercen las medidas de seguridad y tomen acciones enérgicas para restaurar la calma en la ciudad y garantizar la integridad de los ciudadanos y las instituciones.