En una sesión marcada por una fuerte polarización política, el Concejo Municipal de Rosario dio luz verde al nuevo pliego para licitar el sistema de estacionamiento medido. La iniciativa, impulsada por el bloque Unidos, busca modernizar el ordenamiento vial mediante el uso de inteligencia artificial y un esquema de fiscalización unificado, en medio de críticas de la oposición por el impacto recaudatorio.
Modernización y tecnología para reducir la congestión
El proyecto aprobado contempla un cambio de paradigma en la forma en que los rosarinos estacionan en el macrocentro. Según explicaron desde el Ejecutivo, el objetivo principal es fomentar la rotación de vehículos y reducir la "circulación ociosa", es decir, el tiempo que los conductores pasan dando vueltas para encontrar un lugar, lo que genera contaminación y ruidos molestos.
El nuevo esquema eliminará los históricos tótems y parquímetros, reemplazándolos por herramientas tecnológicas avanzadas. "El nuevo pliego incorpora inteligencia artificial para analizar flujos de movilidad en tiempo real, sensores por box y sistemas de escaneo que facilitarán al usuario la búsqueda de espacios disponibles", destacaron desde el oficialismo. Además, se simplificarán las zonas de tres a dos, buscando una mayor claridad para los conductores.
Cruce político por la "tasa cero" de La Libertad Avanza
El debate alcanzó su punto de máxima tensión cuando el bloque de La Libertad Avanza (LLA), liderado por Juan Pedro Aleart, propuso una "prueba piloto de 90 días sin pagar". El objetivo de la moción era recolectar datos sobre la rotación vehicular sin el componente del cobro, bajo la premisa de fomentar el comercio local.
La respuesta del oficialismo no se hizo esperar. El concejal Fabrizio Fiatti calificó la propuesta como un "despropósito" y advirtió que eliminar la regulación sería un retroceso hacia un sistema sin reglas de juego. "Sin concesión no hay reglas, no hay datos, no hay rotación y se agrava la congestión", sentenció Fiatti, cuestionando la postura de LLA en el recinto.
El financiamiento del transporte en la mira
Más allá del ordenamiento vial, el trasfondo económico jugó un rol central en la discusión. El oficialismo recordó que el 20% de lo recaudado por el estacionamiento medido se destina al Fondo Compensador del Transporte, un recurso vital en un contexto donde los subsidios nacionales han desaparecido.
"La ciudad sigue sosteniendo servicios con recursos propios porque Nación no manda lo que corresponde", dispararon desde Unidos, señalando que el municipio hoy cubre casi el 66% del financiamiento del sistema de colectivos. Por su parte, desde LLA criticaron la lógica "recaudatoria" del intendente y denunciaron que el proyecto otorga facultades al Ejecutivo para ampliar el sistema sin pasar nuevamente por el Concejo.
Con la aprobación de este pliego, el municipio queda ahora facultado para llamar a licitación nacional e internacional. Se espera que el nuevo sistema entre en vigencia durante 2026, transformando definitivamente el paisaje urbano de las 532 cuadras que hoy integran el área concesionada.
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