El cardenal italiano Giovanni Angelo Becciu, envuelto en un escándalo financiero, anunció hoy su decisión de no participar en el cónclave que comenzará el próximo 7 de mayo para elegir al sucesor del Papa Francisco. A pesar de reiterar su "convicción de [su] inocencia", Becciu comunicó a través de Vatican News que su determinación responde al deseo de "obedecer la voluntad del Papa Francisco" y contribuir al "bien de la Iglesia", así como a la "comunión y serenidad del Cónclave".
Esta decisión se produce después de que durante las congregaciones generales previas al cónclave se hicieran públicas dos cartas del Papa Francisco, una del año pasado y otra de marzo, que confirmaban la exclusión formal del purpurado del evento. Si bien Becciu había manifestado públicamente no haber recibido una prohibición explícita, la Santa Sede había aclarado su impedimento para votar.
El caso generó malestar dentro del Colegio Cardenalicio, con figuras como Fernando Filoni reconociendo el "sufrimiento" que esta situación provocaba en el seno de la Iglesia.
Cabe recordar que Becciu, de 76 años, fue condenado en un juicio sin precedentes a cinco años y medio de prisión y a inhabilitación perpetua para ejercer cargos en el Vaticano. Las investigaciones se centraron en la compra irregular de un inmueble en Londres con fondos del Óbolo de San Pedro y en una donación a una organización no gubernamental dirigida por su hermano.
El escándalo no solo tuvo repercusiones judiciales, sino también institucionales. Becciu, quien ocupó cargos de gran relevancia en el Vaticano entre 2011 y 2018, fue destituido de su puesto como prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.
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