Marcelo Molina, un hombre de 41 años oriundo de Roldán, desaparecido el pasado 3 de enero, fue asesinado según concluyó la Fiscalía tras una serie de peritajes e investigaciones. A pesar de no haberse encontrado el cuerpo, las pruebas llevaron a los fiscales a imputar a tres detenidos por el delito de "homicidio calificado en grado consumado".
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó que los fiscales Marcelo Vitola y Adrián Spelta lideran la investigación, que incluyó búsquedas con perros, análisis de cámaras de seguridad y diversos relevamientos. Las personas detenidas desde el martes pasado, quienes serán llevadas a una audiencia imputativa en los próximos días, son la pareja de Molina, con quien mantenía una relación desde hace cuatro años, la hija de esta mujer y su cuñado.
Entre los elementos clave de la investigación figuran los datos obtenidos de los teléfonos celulares de los detenidos, peritajes realizados con luminol en la vivienda de Molina, y el seguimiento de la camioneta Volkswagen Saveiro blanca de la víctima a través de cámaras de videovigilancia. La camioneta, al igual que su moto, fue hallada posteriormente.
Además, en la localidad de Monje, un vecino encontró pertenencias de Molina, incluidos su celular, documentos, una tarjeta de débito y una escopeta.
"Con el análisis de los datos surgidos en dichas tareas investigativas se determinó que estas tres personas sean sindicadas como los coautores del delito de homicidio calificado por el concurso premeditado de personas en grado de consumado. Las mismas serán llevadas a audiencia imputativa en los próximos días, fecha y horario a confirmar", detalla el comunicado oficial difundido por la Fiscalía.
La investigación sigue su curso, mientras se aguarda la audiencia donde se formalizarán las acusaciones contra los detenidos.
Marcelo David Molina, de 41 años, fue visto por última vez el viernes 3 de enero en Roldán. Su desaparición ha revelado una trama de engaños y sospechas que ha desconcertado a investigadores y familiares. La pareja de Molina, quien aseguró ser viuda y padecer cáncer, quedó demorada junto a dos de sus familiares luego de que se descubriera que había desvalijado la casa del hombre.
Una vida envuelta en mentiras
Las hermanas de Marcelo, Érika y Silvia, descubrieron que la pareja del hombre había fingido aspectos cruciales de su vida. Según su relato, “hasta hace una semana Romina era una mujer viuda y atravesando un tratamiento por un cáncer”, pero no hay registros de ella en el hospital donde decía atenderse. Además, en su vivienda encontraron a su supuesto esposo, quien estaba vivo y convivía con ella.
La situación se tornó aún más sospechosa cuando vecinos afirmaron que la pareja de Molina y su hija fueron vistas subiendo objetos de la casa del desaparecido a una camioneta. Al ingresar al domicilio de Marcelo, las hermanas hallaron el lugar saqueado: “Faltaba todo lo que él tenía: papeles, carpetas, fotos, ropa, dos televisores, un secarropas...”, aunque algunas herramientas de trabajo permanecían allí.
Hallazgos en Monje y Funes
Durante la búsqueda, en Monje se encontraron el documento, el celular, la tarjeta de crédito y la licencia de conducir de Marcelo. Mientras tanto, en una vivienda en Funes, propiedad de un cuñado de Romina, apareció una moto del desaparecido, lo que derivó en un allanamiento policial. Las autoridades, junto al Equipo Argentino de Antropología Forense, realizaron pericias en busca de pistas adicionales.
El Centro de Monitoreo de Funes confirmó que una camioneta Volkswagen Saveiro blanca, donde Marcelo fue visto por última vez, aparece en las grabaciones de seguridad. Al parecer, él mismo conducía, acompañado por una mujer que podría ser su pareja.
Testimonios inquietantes
Érika recordó la última vez que vio a su hermano el viernes a las 14:30: “Gordita, cuando termines de trabajar llamame que te voy a buscar”, fueron sus últimas palabras. Sin embargo, ese mismo día recibió un mensaje que le resultó extraño: “Me junté, me fui a vivir con mi mujer”, algo inusual, ya que Marcelo prefería enviar audios.
Por otra parte, un hombre cercano a Romina afirmó que esta había fallecido recientemente y que su cuerpo fue trasladado a Santiago del Estero, un dato que las hermanas consideran parte de la trama de mentiras.
La investigación sigue abierta
Romina, su hermana y su cuñado permanecen demorados en la comisaría 6ª de Roldán, mientras la Policía de Investigaciones trabaja en el caso. Un móvil policial custodia la casa de Marcelo, donde se espera la llegada de un equipo que realizará análisis con luminol.
Quienes tengan información sobre el paradero de Marcelo pueden comunicarse con sus hermanas a los números: 3413-553457 o 3413-754325.