A un año del fallecimiento de Jorge Bernardo Griffa, símbolo indiscutible de una época dorada de Newell’s Old Boys, la agrupación Autoconvocados organizó un homenaje para reivindicar su legado como formador de juveniles y su visión sobre el fútbol.
El evento tuvo lugar en un hotel céntrico de Rosario, donde exjugadores, entrenadores, amigos y más de un centenar de hinchas leprosos se reunieron para recordar al "Maestro", un título que le adjudicó, entre otros, Marcelo Bielsa. La consigna del encuentro fue clara: aprender de sus enseñanzas para transformar el presente del club.
Entre los presentes estuvieron su hijo, Jorge Griffa, y referentes históricos como Roque Raúl Alfaro, Carlos Picerni, Ricardo Lunari, José Luis Pavoni, Diego Mateo y Jorge Pautasso (estrechamente vinculado a Gerardo Martino). También asistieron Ariel Palena (preparador físico de renombre) y Juan Manuel "Tati" Fontana (formador de juveniles).
"Este no es un homenaje nostálgico, es proponer recuperar el pensamiento del 'Maestro', sobre todo en este presente tan complicado", expresó Roberto Menzi, de la agrupación Autoconvocados, marcando una postura crítica sobre la actualidad del club.
Por su parte, Jorge Griffa (hijo) destacó la inquebrantable pasión de su padre por el fútbol y por Newell’s, asegurando que "para él eran sinónimos".
Durante el encuentro se recordaron valores fundamentales promovidos por el "Maestro", como "el sentido de pertenencia", la importancia de la calidad humana en la formación de jugadores y su pasión absoluta por el juego.
El reconocimiento llegó a su punto más emotivo cuando el auditorio ovacionó la afirmación de que Jorge Griffa es "la persona más importante en la historia de Newell’s".
Sin embargo, sorprendió la ausencia de un homenaje oficial por parte de la actual dirigencia del club, lo que generó críticas en el evento. "Tal vez, al decir de Diego, ‘se les escapó la tortuga’", deslizaron algunos asistentes.
Lo cierto es que Jorge Bernardo Griffa, quien debutó en Newell’s el 16 de octubre de 1954 y, tras su paso por Europa, se retiró en 1971, sigue siendo una figura central en el corazón del pueblo leproso. Su legado, más vigente que nunca, es un acto de justicia esencial.
