El concejal Lisandro Cavatorta impulsa un proyecto que busca aliviar a los vecinos de Rosario que sufren daños en sus viviendas o veredas provocados por el arbolado público. “Simple, si un árbol te rompió la vereda o la pared de tu casa y no hay respuesta, pagas menos TGI”, afirmó el edil al presentar la iniciativa en el Concejo Municipal.
El crecimiento descontrolado de raíces y la caída de ramas tras tormentas son problemas habituales en la ciudad. Actualmente, la normativa estipula que el Municipio es responsable de reparar estos daños, pero muchas veces los reclamos no obtienen respuesta. Cavatorta denunció: “Hay vecinos que hace años hicieron el reclamo y siguen esperando. Algo tenemos que hacer para cambiar esto”.
El proyecto propone aplicar descuentos en la Tasa General de Inmuebles (TGI) a aquellos frentistas que hayan realizado reclamos sin obtener soluciones en plazos establecidos. Según la ordenanza, si pasan 180 días sin resolución, el descuento será del 16%. Si el tiempo supera los 360 días, alcanzará el 33%. Estos beneficios estarán vigentes hasta que las reparaciones sean ejecutadas.
Cavatorta también señaló la gravedad del problema: “No puede ser que cada vez que hay una tormenta se caen árboles en Rosario. Ya hubo gente atrapada en sus autos. No podemos esperar a que ocurra una tragedia para que el Municipio reaccione”.
El edil hizo énfasis en la importancia de gestionar mejor el arbolado público para evitar daños y accidentes. “Amo a los árboles y quiero que haya más en la ciudad, pero cuando una raíz te está rompiendo la pared de tu casa y nadie hace nada, es un drama para la gente”, expresó. Además, denunció que “más de la mitad de las veredas rotas son por raíces de los árboles. Y casi el 80% de los reclamos presentados en el Concejo no tuvieron respuesta”.
Para acceder al beneficio, los vecinos deberán acreditar la propiedad o usufructo del inmueble afectado y estar al día con la TGI. Además, se propone modificar el artículo 10 de la Ordenanza 5118/91, estableciendo que los reclamos no respondidos en 60 días se consideren aprobados automáticamente, aplicando el principio de silencio administrativo positivo.
Cavatorta concluyó con un llamado a la acción: “El objetivo de este proyecto es que haya una respuesta más rápida. Si la Municipalidad utiliza fotomultas para decirnos que, cuando nos tocan el bolsillo, hacemos las cosas mejor, eso también aplica para la gestión municipal. Sea del partido que sea”.
Este proyecto busca no solo aliviar el bolsillo de los rosarinos afectados, sino también garantizar una respuesta eficiente ante los problemas que el arbolado público genera en los hogares y espacios urbanos.