La Cámara Federal de Paraná evaluará el próximo 14 de noviembre la apelación de Enzo Federico Vignale, de 75 años, y su hijo Federico Andrés Vignale, de 45, quienes fueron procesados por violar en nueve ocasiones la medida cautelar de protección ambiental del Alto Delta. Los empresarios rosarinos organizaron seis fiestas clandestinas masivas y construyeron tres terraplenes que modificaron el flujo de agua, actos que los vinculan además a otras investigaciones de incendios en la región. El juez federal de Victoria, Federico Martin, resolvió en septiembre el procesamiento de ambos ganaderos por desobediencia reiterada y les impuso un embargo de $1.500.000.
El procesamiento surgió luego de que la fiscal federal Rosana Luggren presentara pruebas de que Enzo Federico, como propietario del parador “Wakeland” en las islas del Alto Delta, y Federico Andrés, como organizador de los eventos, incumplieron deliberadamente la medida judicial de protección ambiental. Esta medida, vigente desde julio de 2020, prohíbe “acciones humanas con capacidad para alterar el medio ambiente”. A pesar de su implementación, el Humedal ha experimentado devastadores incendios en los últimos tres años, y los Vignale son señalados como “dueños del fuego” por el portal Era Verde, debido a su relación con terrenos afectados por incendios.
La causa también involucra acusaciones de manipulación de suelo con maquinaria pesada, registradas en tres ocasiones en 2023, afectando gravemente la estructura ambiental del humedal. Las alteraciones incluyen la construcción de terraplenes y lagos artificiales que podrían obstaculizar el curso del agua en futuras crecidas del río.
De confirmarse el procesamiento por parte de la Cámara Federal, la fiscalía podría solicitar la elevación de la causa a juicio oral, y se espera que la audiencia definitoria se realice el próximo 14 de noviembre.