En el estreno de Ariel Holan como director técnico, Rosario Central empató 1-1 con Estudiantes en La Plata, dejando buenas sensaciones y apuntando a consolidar su estilo en los próximos encuentros. Aunque no se cumplió el conocido refrán futbolero de que "técnico que debuta gana", el empate en una cancha históricamente difícil para el Canalla fue valorado como un resultado positivo.
Holan presentó un esquema 4-1-4-1 en su debut, con Ibarra como único mediocampista defensivo y Gómez y Malcorra encargados del armado de juego por el centro. Lovera y Campaz ocuparon las bandas, mientras el equipo apostaba por salir jugando desde el fondo con Broun como eje inicial. La defensa, por su parte, adelantó líneas buscando compactar al equipo.
En el primer tiempo, Central mostró algunas de las ideas trabajadas por Holan en su corto tiempo al mando: "crear sociedades en el medio campo", priorizar la posesión, y ejercer presión alta tras perder el balón. Sin embargo, también se evidenciaron desafíos, especialmente en el retroceso defensivo, donde jugadores como Lovera y Campaz, menos habituados a estas funciones, dejaron espacios.
Estudiantes tomó la iniciativa ofensiva y generó peligro con la movilidad de sus atacantes, lo que exigió intervenciones clave de Broun para mantener el cero. Sin embargo, el equipo local abrió el marcador con un gol de Sosa, aprovechando fallas defensivas auriazules. Central no bajó los brazos y, cerca del final de la primera mitad, empató gracias a una jugada colectiva que terminó con Campaz definiendo frente al arco tras una pared con Malcorra.
El complemento fue más parejo, aunque sin muchas emociones cerca de las áreas. Central tuvo una oportunidad clara con Gómez, cuyo remate salió desviado, y Holan debió realizar cambios obligados debido a molestias físicas de Campaz y Lovera. Pese a los ajustes y al ingreso de Ruben para intentar ganar el partido, ninguno de los dos equipos logró imponerse.
El empate dejó la sensación de un Central en proceso de construcción. "El trabajo de Holan recién arranca", y aunque se vieron destellos de su propuesta, el técnico tendrá que ajustar el funcionamiento del equipo y evaluar a los jugadores más aptos para adaptarse a su idea de juego. Restan cuatro partidos en el torneo para consolidar lo que se vislumbra como una etapa de transición prometedora.