En medio de un partido cargado de tensión entre Boca Juniors y Gimnasia y Esgrima de La Plata, el cual se disputó en el estadio Marcelo Bielsa de Rosario, el ministro de Justicia y Seguridad de Santa Fe, Pablo Cococcioni, y el periodista Diego Brancatelli protagonizaron un cruce en redes sociales. Este enfrentamiento verbal surgió luego de que Brancatelli criticara a la policía por su accionar al utilizar gas pimienta durante un operativo de seguridad que buscaba controlar disturbios en el entretiempo.
El periodista, mediante un mensaje en la plataforma X, manifestó que un oficial santafesino apuntó y disparó gas pimienta pese a la intervención del presidente de Boca y vicepresidente de la AFA, Juan Román Riquelme, quien en ese momento intentaba calmar a los fanáticos: “Aún así le apunta y tira gas pimienta”, expresó Brancatelli, y sugirió la separación del agente involucrado. Confió, además, en que el gobernador Maximiliano Pullaro tomaría medidas al respecto.
La respuesta del ministro Cococcioni no se hizo esperar, respaldando el operativo de la fuerza provincial: “Cuando un policía ejerce la fuerza dentro del marco de la ley, en la Provincia Invencible de Santa Fe no se lo sanciona ni lo separa: SE LO RESPALDA”, subrayó el ministro, rechazando la sugerencia de Brancatelli.
El tenso encuentro y la intervención de Riquelme
El partido por los cuartos de final de la Copa Argentina, que Boca ganó en una definición por penales tras empatar 1 a 1 en tiempo reglamentario, fue interrumpido durante el entretiempo debido a un fuerte enfrentamiento entre ambas hinchadas. Desde la bandeja superior de la tribuna de Boca, seguidores del equipo lanzaron butacas hacia el sector de los hinchas de Gimnasia, quienes respondieron arrojando piedras e intentaron romper el alambrado para enfrentarse directamente.
La policía intervino disparando balas de goma para contener la violencia y evitar que la situación se desbordara, aunque el clima no se calmó hasta que Juan Román Riquelme, ídolo de Boca y dirigente del club, bajó de su palco para intentar pacificar a los seguidores. A su presencia, la hinchada de Boca, conocida como “La 12”, se acercó hacia el cordón policial, provocando un tenso cara a cara con los efectivos. En medio de este diálogo, un agente arrojó gas pimienta cuando un hincha intentó acercarse demasiado, momento en que Riquelme lo detuvo.
En una entrevista con Radio 10, Riquelme compartió sus impresiones: “Cosas de nuestro fútbol y al final tuvimos la suerte de que pudimos seguir jugando el partido, que es lo que importaba”, comentó, destacando la particularidad de cómo se vive el fútbol en Argentina. El vicepresidente de la AFA también señaló: “Yo soy hincha de mi club, amo a mi club y a la gente, siempre siento que tenemos que ayudar para que entendamos que es deporte”. Agradeció a la policía por haber comprendido la situación y pidió que se valore el intento de mantener la calma en un ambiente donde se encontraban niños y mujeres.
El enfrentamiento dejó en evidencia las tensiones alrededor de los operativos de seguridad en el fútbol argentino, un fenómeno marcado por la intensidad de las hinchadas y la complejidad de mantener la seguridad en medio de tales multitudes.