En un fallo trascendental, la jueza federal Zunilda Niremperger, titular del Juzgado Federal N°1 de Resistencia, ha dispuesto la suspensión de los desmontes en la provincia de Chaco por un período de tres meses, o hasta que se reevalúe la situación. Esta decisión responde a una medida cautelar solicitada por el fiscal federal de la capital chaqueña, Patricio Sabadini, y respaldada por la Asociación Argentina de Abogadxs Ambientalistas (AAdAA).
La medida judicial fue dictada en el contexto de una causa que investiga a siete imputados, entre ellos actuales y exfuncionarios, así como legisladores provinciales, acusados de facilitar la tala indiscriminada de árboles en el territorio chaqueño. La jueza Niremperger, en consonancia con lo planteado por el fiscal Sabadini, resolvió "hacer lugar a la medida cautelar solicitada por el término de tres meses o hasta tanto se reevalúe las condiciones de admisibilidad de la presente". En consecuencia, ordenó al Poder Ejecutivo de la provincia del Chaco, a través del Ministerio de Producción y Desarrollo Económico Sostenibles, suspender los desmontes, tanto aquellos ya autorizados pero no ejecutados, como la emisión de nuevos permisos.
En su fallo, la jueza subrayó la necesidad de prevenir "el daño inminente e irreversible que podría ocasionarse al ecosistema en caso de continuarse con los actos de desmontes en el territorio de esta provincia, sobre todo en las áreas protegidas". Además, destacó la importancia de aplicar el principio in dubio pro natura, que dicta que en caso de duda, las decisiones deben favorecer la protección y conservación del medio ambiente.
La magistrada también hizo énfasis en la interdependencia entre los bosques, la tierra y los seres humanos, especialmente en las comunidades indígenas que habitan en estas áreas. "La afectación al ambiente es una afectación a la humanidad," afirmó, señalando que el daño ambiental tiene un impacto particular en los grupos vulnerables, incluidos pueblos indígenas, personas en situación de pobreza y minorías.
El origen de la causa data del 3 de julio de 2024, cuando la Asociación Argentina de Abogadxs Ambientalistas denunció un "entramado de corrupción" entre funcionarios públicos y el sector privado, que habría facilitado la tala indiscriminada de bosques nativos en Chaco. Este entramado, según la denuncia, habría resultado en daños irreversibles para el ecosistema y las generaciones futuras.
En la solicitud de la medida cautelar, el fiscal Sabadini destacó la gravedad de los hechos y apeló a la responsabilidad de la jueza Niremperger, instándola a contribuir en "la salvación de este planeta". Sabadini también citó la encíclica "Laudato Sí" del Papa Francisco, que llama a la protección del medio ambiente como un deber urgente para la humanidad.
Finalmente, la jueza Niremperger ordenó la suspensión inmediata de todos los desmontes en la provincia de Chaco, medida que estará vigente durante tres meses o hasta que se reevalué la situación legal.
