El panorama económico y laboral en Argentina se ve marcado por sombrías cifras que reflejan la profundización de la recesión y el deterioro del mercado laboral. Mientras que el Plan Motosierra impacta en las ventas minoristas, el informe presentado por el diputado socialista Joaquín Blanco revela números preocupantes sobre el empleo formal en la provincia de Santa Fe.
Según el último informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las ventas minoristas pymes experimentaron una caída del 7,3% interanual en abril, acumulando una baja del 18,4% en el primer cuatrimestre del año. Esta tendencia negativa afecta a diversos sectores, siendo la perfumería uno de los más golpeados con una caída del 23,3%, seguido por la ferretería y materiales de construcción con una retracción del 11,2%.
El impacto de la recesión se evidencia en la reducción del poder adquisitivo de los consumidores, quienes recortan gastos en todos los rubros, excepto en indumentaria y textil, que registra un incremento del 8,8%. Sin embargo, este aumento no es suficiente para contrarrestar la tendencia generalizada a la baja en las ventas.
Por otro lado, el informe presentado por Joaquín Blanco destaca una situación preocupante en el mercado laboral de Santa Fe. La tasa de empleo en la provincia ha experimentado una disminución del 2,1% en la última década, acompañada de un aumento del trabajo informal. Esto se refleja en un crecimiento del trabajo por cuenta propia y una disminución del empleo asalariado, lo que indica un incremento de la informalidad laboral.
Además, el informe señala una marcada heterogeneidad en el territorio provincial, con desequilibrios en el nivel de desarrollo entre los diferentes departamentos. Mientras algunos departamentos exhiben salarios por encima del promedio provincial, otros se encuentran significativamente por debajo, evidenciando amplias brechas en el nivel de ingresos y calidad del empleo.
Ante este panorama desafiante, tanto a nivel nacional como provincial, urge la implementación de políticas públicas orientadas a reactivar la economía, promover el empleo decente y reducir la informalidad laboral. La planificación estratégica y la colaboración entre el sector público y privado son fundamentales para enfrentar estos desafíos y generar un desarrollo económico sostenible en todo el país.
