La ministra de Salud de Santa Fe, Silvia Ciancio, hizo una declaración contundente en respuesta a la creciente crisis del dengue en la provincia: "Si Nación no define una política de vacunación contra el dengue, lo hará la provincia". Esta afirmación refleja el compromiso de Santa Fe en abordar la situación de manera proactiva.
En medio de un aumento alarmante de casos confirmados de dengue, que superan los 37 mil, y cinco nuevos fallecimientos, la provincia ha intensificado sus esfuerzos para combatir la enfermedad. Además, se ha destacado el aumento de la producción en el laboratorio público de repelentes, que se distribuyen en los centros de salud de la región.
A diferencia de la postura nacional, representada por el ministro de Salud Mario Russo, quien señaló que la vacuna Takeda está disponible pero no se ha incluido en el calendario de vacunación, Santa Fe está dispuesta a tomar medidas más proactivas en este aspecto si no hay una definición a nivel nacional.
Ciancio atribuyó el aumento de casos a factores climáticos, como las lluvias abundantes durante el último verano después de la sequía, y a la falta de conciencia social en medidas preventivas, como el descacharrado. Destacó que la vacunación es fundamental, pero también enfatizó la importancia de la concientización y la vigilancia epidemiológica.
Además de las medidas preventivas, se ha garantizado el aumento en la producción de repelentes por parte del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) de la provincia y la distribución diaria en los centros de salud municipales, donde se habían registrado faltantes la semana pasada.
En resumen, Santa Fe está tomando medidas decisivas para hacer frente al brote de dengue, tanto en términos de prevención como de tratamiento, y está lista para asumir un papel de liderazgo en la vacunación si es necesario.