Es Tiempo de Viajar , Hoy Alemania - Dresde

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Nos fuimos de Berlín y nuestra ruta sigue por algunas ciudades de Alemania. Después de 200 km, llegamos a Dresde, que al igual que Berlín, fue destruida casi por completo por las fuerzas aliadas, tres meses antes que Alemania capitulara y finalizar la Segunda Guerra Mundial.


Dresde es una de las ciudades más bonitas de Alemania y eso te lo puedo decir hoy, porque si hubiera vivido durante la Segunda Guerra o en los años 1600, te diría que la ciudad es una de las más tristes, grises y destruidas de Alemania.

¿Y cómo es eso?

A fines del siglo XV, la ciudad se convirtió en la residencia del soberano de Sajonia y así se convierte en un centro político y cultural de mucha importancia. Debido a esto pasa a ser la ciudad más importante del Sacro Imperio Romano Germánico y desde esa ápoca viene el prestigio de la ciudad.

Pero con el correr de los siglos, Dresde sufrió también casi todas las guerras y desastres europeos.

Se incendió totalmente en 1685, fue conquistada por Prusia durante la Guerra de Sucesión Austríaca y también durante la Guerra de los Siete Años y antes de retirarse los prusianos en 1756 fue nuevamente incendiada. Prusia ataca a Dresde nuevamente 4 años después, esta vez sin éxito, pero igual tuvo que soportar un intenso bombardeo.

Luego llegarían las hostilidades entre Alemania y Francia, luchas que duraron 150 años, ya que los monarcas alemanes se arrogaban el poder de destruir todo lo ganado durante la Revolución Francesa, ocurrida en 1789.

Ya en 1813 y durante la Guerra de la Sexta Coalición contra Napoleón tienen lugar, tanto en Dresde como en Leipzig, grandes batallas contra los franceses y con el tiempo, la ciudad se entregaría a Napoleón.

A lo largo del siglo XIX se convirtió en la capital de uno de los reinos más fuertes que había en el Reich formado en 1871.

Ya con la Segunda Guerra Mundial, tres meses antes de capitular Alemania, Dresde, la Florencia del Elba, fue totalmente destruida, debido a su colección de obras de arte y riqueza arquitectónica.


El Bombardeo de Dresde

Con el fin de destruir objetivos militares, de comunicación y de producción, así como de minar la moral de la población, los Aliados llevaron a cabo incontables bombardeos sobre las ciudades alemanas, hasta reducir algunas de ellas a escombros.

Entre el 13 y el 15 de febrero de 1945 tres meses antes de la caída de Alemania hubo 4 ataques aéreos sobre la ciudad y durante ese período dicen que murieron 40.000 civiles (aunque muchos hablan de 250.00 víctimas fatales) y cientos de monumentos y edificios fueron destruidos o incendiados.

Durante esos días, 800 aviones estadounidenses y británicos lanzaron sobre la ciudad unas 4000 toneladas de bombas explosivas e incendiarias. Esa Tormenta de Fuego llenó las calles de cadáveres carbonizados y haciendo dificultoso la identificación de ellos. Las grandes temperaturas alcanzadas derritieron el vidrio y el metal. El remolino creado por el monstruoso consumo de oxígeno succionó hacia su interior a todo lo que encontraba incluyendo todo tipo de objetos y personas. Estas murieron calcinadas, de shock térmico o asfixiados en los refugios por gases de la combustión o falta de oxígeno.

Hoy esas estructuras se muestran de pie, como gloriosas estructuras y las podes ver aún  cubiertas de un tinte de hollín negro que le da un aire entre ancestral y fantasmagórico que recuerdan el conflicto bélico.

El bombardeo sobre Dresde sigue siendo uno de los episodios más polémicos de la Segunda Guerra Mundial y todavía persiste el debate sobre si la capital sajona era un objetivo de interés estratégico, tal y como aseguraban varias fuentes militares aliadas​ o por el contrario el bombardeo fue una represalia desproporcionada e indiscriminada y en realidad se trató de Crímenes de Guerra.


Con el tiempo se desclasificaron documentos internos del partido nazi que contradecían las estimaciones de la cantidad de muertos.

Un paseo por Dresde

Dresde es una ciudad chica que se puede visitar en un día, pero hay muchos lugares que se pueden conocer y a veces es necesario quedarse unos tres días. Seguro visitaras el Centro Histórico donde tranquilamente podes conocer todo su patrimonio.

Y uno de eso sitios a visitar es la Frauenkirche que es la iglesia barroca que terminó de reconstruirse en el 2005, desde que fue destruida en 1943 y está ubicada al lado del  Neumarkt en la Georg-Treu-Platz. El templo ardió completamente la noche de los bombardeos y dos días más tarde se derrumbó la cúpula y así estuvo, en ruinas durante 40 años. Sus escombros decoraron la plaza hasta el año 1990 cuando se aprobó la reconstrucción de la iglesia gracias a los ciudadanos, donde un grupo de vecinos lograron recaudar cien de los 130 millones de euros para reconstruirla y gracias a documentación existente, la iglesia pudo reconstruirse exactamente igual a la original.

Es uno de los símbolos de Dresde y una visita imprescindible en cualquier recorrido por la ciudad sajona. Fue construida originalmente entre 1726 y 1743 y en aquella época era considerada una de las iglesias barrocas más bonitas de Europa.

También está el Semperoper que es el nombre que recibe la Ópera Nacional Sajona. Uno de los edificios más majestuosos de la ciudad, situado en pleno casco histórico. Acá se estrenaron obras de grandes maestros como Strauss, Weber o Wagner. O la Catedral Hofkirche, mandada a construir a mediados del siglo XVIII por Augusto El Fuerte tras su conversión al catolicismo y así poder obtener la ansiada corona polaca.

Hay una imagen que llama mucho la atención y es el Fürstenzug o el Desfile de los Príncipes, que es un espectacular mural de más de 100 metros de largo que se extiende por la Schloss strasse, realizado con 24.000 piezas de porcelana, siendo el mural con éstas piezas más grande del mundo. A lo largo de la imagen se muestran los principales miembros de la Casa de Wettin, dinastía que aglutina condes, duques, príncipes y monarcas alemanes que gobernaron el territorio de Sajonia durante más de 800 años, desde entre 1123 y 1906. Afortunadamente, el hermoso mural sobrevivió al bombardeo y hoy se disfruta de su impresionante imagen al aire libre en pleno centro de Dresde.

Uno de los sitios más visitados de la ciudad es el Pasaje Kunsthof o Kunsthofpassage.  Este es el Pasaje de los Patios Artísticos, con edificios decorados con tubos y embudos en la fachada y cuando llueve el agua que recogen produce sonidos. Por eso las llaman las tuberías cantarinas y se encuentran en la fachada de un edificio azul turquesa. Cuando llueve, las tuberías emiten sonidos como si fuera música.


En la zona también hay tiendas, galerías y cafeterías. Se encuentra en el artístico barrio de Neustadt y se divide en 5 patios con tiendas independientes que venden productos relacionados con la artesanía, ropa vintage, flores y especialidades locales.

Muy cerca de Neustadt hay un lugar que queríamos conocer desde hace mucho: Una Lechería, que presume de ser la más bonita del mundo y razón no les falta ya que está todo igual a como era en 1879 cuando un ganadero local llamado Paul Gustav Leander Pfund decidió abrir el establecimiento para vender leche fresca a la gente y te puedo decir que el local aún mantiene sus paredes decoradas con azulejos de porcelana neo renacentista, llenos de imágenes de flores, seres celestiales y animales.

Al parecer, en sus inicios había una zona de la lechería donde se ordeñaban las vacas y durante el dominio soviético la lechería se nacionalizó pero se conservó porque estaba catalogada como monumento. Hoy en día sigue abierta al público y vende lácteos y quesos. También podés quedarte a disfrutar de un café o llevar algo para comer. Es especial para los que tenemos alma de gordos.

En el 2015, la ciudad fue laureada con el Premio de Europa, una distinción otorgada anualmente desde 1955 por el Consejo de Europa a los municipios que tuvieron esfuerzos notables para promover el ideal de la unidad europea.

Para el final, te cuento que al igual que otros países que pudimos visitar durante éste viaje, en Dresde también hay banderas de Ucrania que muestran el apoyo a ese país en su guerra con Rusia, pero está claro que es un apoyo sin intervención de ningún tipo y los mensajes son algo así como: “Hermanos ucranianos, sigan con su lucha, nosotros los apoyamos en ésta lucha contra Rusia, pero nosotros nos quedamos cada uno en nuestro lugar, así que mucha suerte”

Mañana salimos para Múnich.

Unos 460 km que bordean la frontera de Chequia (ex República Checa) nos esperan.

Nos veremos pronto.

Guten Abend Dresden, wir sehen uns in München.

Buenas noches Dresde, nos veremos en Munich.



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