El peronismo se encuentra en un momento crucial luego de la asunción de Javier Milei como presidente. En medio de la derrota electoral, el partido debate su nuevo rol como oposición, enfrentando desafÃos internos y tensiones por la transferencia de recursos del Tesoro nacional.
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Aunque logró mantener la unidad en el Congreso, las disputas entre gobernadores por los recursos y la incertidumbre sobre las medidas del gobierno de Milei podrÃan afectar la elección del próximo presidente del Partido Justicialista. En este escenario, la provincia de Buenos Aires emerge como un reducto clave para el ala dura kirchnerista, que busca ganar poder y proyección nacional.
Negociaciones y desafÃos internos
El peronismo observa la fragmentación del oficialismo como espectador y busca sacar ventaja de la necesidad de negociación que enfrentará el gobierno nacional. Sin embargo, la falta de definiciones y detalles de las medidas genera incertidumbre, poniendo a los gobernadores en un papel crucial en esta disputa.
Asà como Milei cambió la estrategia de la oposición al asumir, el peronismo también redefine su papel. A diferencia de 2015, ahora busca mantenerse unido y resolver las diferencias internas rápidamente, consciente de que el éxito dependerá de varias condiciones.
CrÃticas al ajuste propuesto por Milei
Tras el primer mensaje del presidente Milei, la atención se centra en las medidas económicas que anunciará el ministro de EconomÃa, Luis "Toto" Caputo, y en los proyectos que se enviarán al Congreso. Figuras del peronismo, como AgustÃn Rossi y Germán MartÃnez, expresan preocupación por un posible ajuste brutal que impactarÃa en la actividad económica, generando recesión, despidos y pérdida del poder adquisitivo.
La provincia de Buenos Aires como bastión de resistencia
En territorio bonaerense, el ala dura kirchnerista se atrinchera, liderada por Axel Kicillof, que renovó su mandato con más del 45% de los votos. La pelea por los recursos coparticipables anticipa tensiones con otros gobernadores, incluso dentro del PJ.
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Kicillof reclama una mayor justicia distributiva para la provincia, destacando que aporta casi el 40% de la coparticipación y recibe poco más del 20%. Además, la provincia se presenta como el lugar desde donde el kirchnerismo resistirá el plan libertario de Milei.
Alianzas y posicionamiento
Sergio Massa, a pesar de ser el gran ausente en la asunción de Kicillof, busca posicionarse como lÃder de la oposición y ratifica su alianza con Máximo Kirchner y Kicillof. Mientras tanto, la CGT, gremios k y organizaciones sociales esperan los primeros anuncios, mostrando una postura expectante pero advertente sobre hasta dónde estarán dispuestos a negociar el ajuste.
El debate en estos sectores se centra en ser razonables en la resistencia y en cuándo salir a reclamar ante las primeras medidas del gobierno de Milei. En este contexto, el peronismo se enfrenta a un periodo de reorganización y redefinición de estrategias para consolidarse como una oposición unida y resistente.
