Tras una jornada electoral que marcó un claro giro hacia la derecha, Honduras vive un recuento de votos muy ajustado entre el empresario Nasry Asfura y el presentador de televisión Salvador Nasralla. Con más de la mitad de las actas escrutadas, Asfura, quien cuenta con el apoyo explícito del expresidente estadounidense Donald Trump, aventaja a su principal rival por un margen de apenas medio punto porcentual. La gran perdedora de los comicios fue la izquierda oficialista, cuya candidata quedó relegada a un distante tercer lugar.
El lento conteo de votos del Consejo Nacional Electoral (CNE) revela que la diferencia entre ambos aspirantes es mínima, con solo 515 sufragios a favor de Asfura, conocido popularmente como “Tito” o “Papi”. El empresario, exalcalde de Tegucigalpa y representante del Partido Nacional (PN), obtiene el 40% de los votos, mientras que Nasralla, del Partido Liberal (PL), se ubica en 39,8%. Este escenario polarizado se da en un país golpeado por la violencia de las pandillas, el narcotráfico y una profunda crisis económica.
💥 El factor Trump y la amenaza del "Narco-Estado"
La elección en Honduras estuvo fuertemente marcada por la injerencia y las declaraciones directas del expresidente Donald Trump. El republicano respaldó sin reservas a Asfura y utilizó una retórica anticomunista, advirtiendo que la permanencia de la izquierda podría convertir al país en una nueva Venezuela.
Trump llegó a etiquetar a la candidata oficialista, Rixi Moncada, como amiga del presidente venezolano Nicolás Maduro y sus "narcoterroristas". Además, el expresidente estadounidense redobló la apuesta al anunciar que indultará al expresidente Juan Orlando Hernández, condenado en EE.UU. a 45 años de cárcel por narcotráfico. Según la justicia norteamericana, Hernández convirtió a Honduras en un "narco-Estado", pero Trump considera que fue víctima de un "montaje" político.
🤝 Nasralla se distancia del oficialismo y busca referentes en la región
Pese a que Trump también calificó a Salvador Nasralla de “casi comunista” por su pasado vínculo con la actual administración, el presentador de televisión ha intentado despegarse. Nasralla, quien compite por la presidencia por tercera vez, ha manifestado admiración por figuras de la derecha regional como el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, y el argentino Javier Milei.
El candidato liberal atribuyó las críticas de Trump a una "desinformación malintencionada" de sus adversarios. Tanto Asfura como Nasralla basaron gran parte de su campaña en advertir sobre el riesgo de que el país adopte un modelo similar al venezolano si la izquierda se mantenía en el poder. En un gesto hacia Washington, ambos prometieron también restablecer lazos con Taiwán, luego de que la actual presidenta, Xiomara Castro, acercara a Honduras a China en 2023.
📉 Castigo electoral a la izquierda y el futuro incierto
Los resultados de esta elección a una sola vuelta confirman el profundo castigo de los hondureños a la gestión de la presidenta Xiomara Castro, quien llegó al poder en 2021. La abogada Rixi Moncada, candidata oficialista y parte de la coalición que sacó a la izquierda del poder, se encuentra más de 20 puntos por debajo de los dos líderes.
Este panorama pone fin a la inédita polarización de izquierda-derecha que se profundizó tras el golpe de Estado contra el esposo de Castro, Manuel Zelaya. Mientras Asfura se dijo listo para colaborar con el principal socio comercial del país, donde viven dos millones de hondureños, el ajustado margen augura un escenario de alta tensión política y de incertidumbre hasta que se conozcan los resultados finales del lento escrutinio.
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