El flamante jefe de Gabinete, Manuel Adorni, salió a responder sin rodeos a las críticas que Mauricio Macri había deslizado en redes sociales por su designación, en reemplazo del saliente Guillermo Francos. Adorni fue contundente y marcó el límite institucional de las discusiones: "El Gabinete, mal que le pese a él o a cualquiera, lo elige el presidente", sentenció.
La controversia se originó cuando Macri cuestionó la salida de Francos, a quien consideraba un hombre de "capacidad y equilibrio", y deslizó la inexperiencia de su reemplazante. El líder del PRO había sugerido incluso que Horacio Marín, titular de YPF, era "alguien más idóneo" para el cargo.
Un Desafío Público y la Sorpresa por el Nombramiento
Adorni reconoció que el tuit de Macri le "llamó la atención, más que me sorprendió", pero minimizó la discusión como un "tema de segundo orden" frente a la decisión presidencial. No obstante, el funcionario tomó el guante y lanzó una apuesta personal.
"Le tomo el desafío, ¿no? A ver cómo me va en la jefatura de Gabinete. Ojalá que me vaya bien, así cuando termine mi función, sea cuando sea, lo llamaré y le diré: ‘Viste que estabas equivocado’", afirmó Adorni.
El nuevo jefe de Gabinete también opinó sobre el rol de los exmandatarios, señalando que deben "colaborar en que el gobierno de turno [...] trate de empujar para adelante". Para Adorni, el mensaje de Macri no estuvo "realmente en esa línea".
El Trasfondo: Disconformidad Tras la Cena en Olivos
La designación de Adorni, que él mismo reconoció le tomó por sorpresa, se dio en el marco de una profunda reestructuración del equipo ministerial. El periodista venía preparándose para asumir como legislador porteño antes del ofrecimiento de Milei.
La disconformidad de Macri con los cambios se hizo pública luego de una cena con el presidente Milei en la Quinta de Olivos. El expresidente había reconocido en su cuenta de X que, pese a la búsqueda de definir cómo reforzar los equipos, "No logramos ponernos de acuerdo" en la reunión.
Macri lamentó la "decisión desacertada" en la Jefatura de Gabinete y la persistencia de disputas internas. Aclaró que su preocupación es por el "futuro del país" en una "oportunidad histórica", y que no busca "ningún beneficio personal". La respuesta de Adorni reafirma que el Poder Ejecutivo no cederá en sus decisiones internas ante las presiones externas, incluso viniendo de un aliado clave.
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