Desde el 14 de noviembre de 2024, la nueva modalidad de "Propina Electrónica" está disponible en Argentina para servicios de gastronomía, hotelería, expendio de combustibles y delivery, gracias a la implementación del decreto 731/2024. A través de este sistema, los consumidores podrán incluir un "tip" de manera digital en la factura final, utilizando tarjetas de débito, crédito o billeteras virtuales.
La normativa obliga a los comercios de los sectores mencionados a ofrecer la posibilidad de propina electrónica. Los consumidores tienen la libertad de elegir el monto y decidir si desean que se sume al ticket final o se entregue directamente al trabajador. La propina electrónica puede acreditarse en una cuenta del trabajador o en una cuenta separada del comercio, la cual debe transferir el monto al empleado en un plazo máximo de 24 horas, ya sea en efectivo o digitalmente.
Uno de los aspectos más relevantes de esta iniciativa es que las propinas electrónicas no generarán obligaciones impositivas para los empleadores, eliminando un obstáculo que antes elevaba los costos para los comercios. Este cambio se debe a que, bajo la nueva regulación, las propinas no se considerarán parte de la remuneración laboral, evitando así la aplicación de retenciones impositivas y considerándolas una gratificación de libre disponibilidad para el trabajador.
Con esta medida, se espera facilitar el incentivo para empleados en servicios clave, brindando comodidad tanto a trabajadores como a consumidores, y modernizando las prácticas de gratificación en el país.