El sector de taxistas atraviesa una situación económica crítica en la ciudad, donde renovar o transferir una chapa de taxi implica un desembolso millonario. Agrupaciones de titulares acudieron al Concejo Deliberante para exigir medidas que atenúen estos costos desmedidos, que actualmente alcanzan los 3.340.000 pesos en un solo pago. Esta cifra es necesaria para renovar los derechos de explotación y transferir la unidad, mientras que el costo se eleva a 5 millones de pesos si se opta por la financiación.
La Asociación de Mujeres Conductoras fue una de las principales agrupaciones en presentar un proyecto que busca reducir drásticamente los costos. Proponen que el trámite se ajuste a 500 módulos tributarios (MT), en lugar de los 10.935 MT actuales, lo que significaría un monto cercano a los 150.000 pesos. “Es imposible pagar eso. La ciudad de Córdoba no paga un canon sino un simple sellado”, expresaron representantes de la Asociación.
La Cámara de Mujeres Taxistas también elevó un proyecto con el respaldo de varias organizaciones del sector, solicitando la exención del canon por derechos de explotación durante 24 meses. Según José Iantosca, de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis (CATILTAR), el costo de poner un taxi en funcionamiento, sumando todos los gastos asociados (canon, transferencia, pintura, tapizado), oscila entre 5 y 6 millones de pesos. “Es inviable tener un taxi”, afirmó Iantosca, destacando la insostenibilidad económica para los taxistas.
Además, mencionó otros proyectos relacionados, como la creación de un equipo de inspectores que detecte el uso de aplicaciones ilegales para ofrecer servicios de transporte, así como un fondo compensador financiado con las multas a estas empresas. “No nos interesa la regulación de Uber. Les estamos diciendo de dónde sacar la plata para controlar a Uber”, añadió.
El sector también rechaza la regulación de Uber, argumentando que la plataforma solo se interesa en la recaudación y que en algunos casos sus viajes cuestan menos que la tarifa mínima de un taxi. Mario Cesca, de la Asociación de Titulares de Licencias de Taxis (ATTI), hizo eco de estas preocupaciones, afirmando que el costo actual de la renovación de licencias carece de sentido.
“En un momento valía 50.000 dólares una licencia. Hoy ponen un cartelito 'Vendo auto, Regalo chapa'”, comparó Cesca, graficando la pérdida de valor de las chapas y la precariedad laboral que enfrenta el gremio.
Los taxistas advierten que si no se toman medidas inmediatas, el sector podría entrar en una crisis aún mayor, perjudicando tanto a los conductores como a los usuarios del servicio.