El Gobierno nacional dispuso el cierre definitivo del Museo Nacional de la Historia del Traje, ubicado en el barrio de San Telmo, a través de un decreto publicado en el Boletín Oficial. La casona, que funcionaba como museo desde 1972, ahora será transformada en un centro cultural. Según la Secretaría de Cultura, la decisión se fundamenta en "el bajo número de visitantes", con un promedio de 46 personas por día, y en los costos operativos, que superaban los 66 millones de pesos anuales en personal.
A pesar del cierre, la Secretaría de Cultura aseguró que la colección, compuesta por más de 9.000 piezas históricas, seguirá resguardada en el edificio. Las autoridades también adelantaron que parte de la colección será exhibida mediante muestras itinerantes en distintos espacios culturales del país.
La casona que albergaba el museo es un edificio de 1870, antigua residencia de las familias Anasagasti y Luzuriaga. De estilo italianizante y conocida como una típica “casa chorizo”, la construcción es representativa de la arquitectura doméstica porteña de la época, con sus habitaciones alineadas a lo largo de un pasillo, zaguán y patios internos.
El Museo Nacional del Traje se dedicaba a preservar y recrear el legado de la moda a lo largo de la historia, explorando cómo el traje se vinculaba con el arte y el contexto social. La colección comprendía piezas que abarcaban desde el siglo XVIII hasta la actualidad, incluyendo prendas de los pueblos originarios, la influencia de la inmigración y momentos icónicos como la vestimenta del gaucho y los trajes de Eva Perón, destacando el diseño de Christian Dior para el New Look.
Además, se encontraban prendas emblemáticas de las décadas de los 60 y 70, reflejando la evolución de la moda en el siglo XX.
