El embajador de Brasil, Julio Bitelli, con la canciller Diana Mondino. (Foto: X/@CancilleriaARG).
El embajador de Brasil en Argentina, Julio Bitelli, ha intentado rebajar la tensión entre los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Javier Milei. Bitelli afirmó que la llamada a consultas que lo llevó a Brasilia no fue una señal de enojo, sino una oportunidad para discutir con el presidente Lula, el canciller Mauro Vieira y otros ministros sobre cómo fortalecer las relaciones bilaterales.
“No es una llamada de enojo, es para mapear oportunidades con esta nueva Argentina,” insistió Bitelli en declaraciones radiales, subrayando que la consulta no seguía el patrón diplomático tradicional de manifestar descontento. Además, confirmó su regreso a Buenos Aires la próxima semana.
Bitelli enfatizó que “las relaciones entre Argentina y Brasil siguen como tradicionalmente lo hicieron, son muy amplias y profundas”. Sin embargo, reconoció las diferencias ideológicas entre Milei y Lula, destacando que la consulta buscaba identificar formas de colaboración que trasciendan estas discrepancias.
“Si los presidentes se quieren o no es anecdótico. Las relaciones entre Argentina y Brasil son muy profundas,” añadió, resaltando la importancia de los lazos comerciales y diplomáticos entre ambos países.
El embajador también comentó sobre su “excelente comunicación” con la canciller argentina Diana Mondino, quien estaba al tanto de su viaje a Brasilia. Bitelli contrastó la situación con la crisis actual en las relaciones de Argentina con España y Bolivia, afirmando que “esto no es lo mismo que lo que está pasando con España o Bolivia”.
La Tensa Relación Entre Lula y Javier Milei
El viaje de Bitelli a Brasilia se produce diez días después de que Milei visitara Brasil por primera vez desde su asunción en diciembre, no para reunirse con Lula ni con miembros del gobierno, sino para participar en una cumbre de ultraderecha y encontrarse con el expresidente Jair Bolsonaro.
Milei aún no ha tenido un encuentro privado con Lula, ni siquiera una conversación telefónica, aunque le ha enviado dos cartas personales. Las relaciones entre ambos han sido nulas desde que Lula apoyó al entonces candidato peronista Sergio Massa durante la campaña electoral. En respuesta, Milei calificó a Lula de “corrupto” y “comunista”.
Lula expresó que esperaba una disculpa de Milei tanto a él como a Brasil por sus declaraciones. Sin embargo, Milei respondió que no pediría perdón, alegando que solo había dicho “la verdad”.
Bitelli reconoció que “no está en agenda” un encuentro entre Lula y Milei, pero pidió “desdramatizar ese asunto”. “Lula y Milei se van a encontrar cuando se tengan que encontrar”, sostuvo el embajador.
Por último, Bitelli mencionó un “cauto optimismo” entre los empresarios brasileños respecto a la gestión de Milei, aunque están “esperando cuáles son los resultados de las nuevas medidas económicas” antes de tomar decisiones.
