En medio de los recientes cambios en la administración libertaria, Manuel Adorni, vocero presidencial, emerge como uno de los ganadores. Según información de LA NACION, Adorni incrementará su poder dentro del Gobierno, asumiendo el control de la agencia Télam, el sistema de medios públicos y la producción de contenidos del oficialismo.
Paralelamente, Luis "Toto" Caputo, titular del Palacio de Hacienda, se encargará de las privatizaciones, que antes estaban bajo la Jefatura de Gabinete. Ambos funcionarios han fortalecido su posición en el esquema de confianza presidencial en los últimos seis meses.
Inicialmente, el presidente había planeado que las privatizaciones fueran gestionadas por Nicolás Posse. Sin embargo, la salida del exjefe de Gabinete cambió los planes, delegando la tarea al Ministerio de Economía. El Gobierno pretende privatizar y concesionar 41 empresas estatales, aunque el número se redujo a seis tras negociaciones en el Senado. Estas son: Energía Argentina (ex-ENARSA) e Intercargo para venta total, y AySA, Corredores Viales, Belgrano Cargas y Trenes Argentinos para concesión. La Cámara de Diputados podría incluir Aerolíneas Argentinas, Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina (RTA) en la lista de privatizaciones.
Mientras tanto, Adorni tomará las riendas de los medios públicos y la agencia Télam, la cual el Gobierno había prometido cerrar. Ahora se planea su reformulación, quedando solo la agencia de publicidad oficial con menos de 100 trabajadores. Esta nueva entidad podría llamarse Agencia de Publicidad del Estado y centralizará licitaciones que no se pueden hacer individualmente.
Existen versiones contradictorias sobre el futuro de Télam. Una opción es que continúe con alrededor de 100 trabajadores, mientras otra propone su cierre definitivo, aunque no hay confirmación oficial.
Adorni, cercano al presidente Javier Milei y su hermana Karina, ha visto crecer su influencia desde que asumió en diciembre de 2023. El 2 de febrero, se anunció que Adorni absorbía todo el área de Comunicación de Gobierno, previamente bajo Eduardo Serenellini, secretario de Medios.
La confianza en Adorni es tal que compartirá el despacho de la Jefatura de Gabinete con Karina Milei, tras la salida de Posse. Guillermo Francos, sucesor de Posse, optó por mantener su oficina en el Ministerio del Interior.
"Todas las empresas públicas son susceptibles de privatización; veremos si es ahora o más adelante, lo decidirá Diputados", declaró Adorni tras la aprobación de la Ley Bases, refiriéndose a Aerolíneas Argentinas, el Correo y RTA. Afirmó que la idea no es cerrar estas empresas, sino salvarlas mediante la inversión de capitales privados. Francos confirmó que presentarán nuevos proyectos de concesión o privatización.
