La participación de Newell's Old Boys en la Copa de la Liga Argentina ha sido un viaje tumultuoso, marcado por momentos de brillantez y desilusión. Lo que comenzó como un prometedor arranque se desvaneció gradualmente hasta culminar en una campaña que no alcanzó las expectativas del equipo ni de sus seguidores.
El DT uruguayo empezó muy bien pero su equipo finalmente quedó en deuda
El balance numérico deja entrever una campaña discreta: el equipo terminó en el 7° lugar de su grupo con 21 puntos en 14 partidos, registrando 6 victorias, 3 empates y 5 derrotas. A pesar de mantenerse competitivo en la mayoría de los encuentros, la falta de consistencia en el desempeño y los resultados irregulares contribuyeron a una sensación de frustración generalizada.
Uno de los pocos puntos destacados fue la actuación del delantero uruguayo "Colo" Ramírez, quien se destacó como el goleador del equipo con 8 tantos en 14 juegos. Sin embargo, su rendimiento no fue suficiente para impulsar al equipo en los momentos decisivos del torneo.
En contraste, la decepción llegó de la mano de Franco Díaz, cuyo prometedor comienzo se vio opacado por una notable caída en su nivel de juego, además de una declaración desafortunada que lo marginó del equipo.
Por otro lado, la revelación del torneo fue Rodrigo Fernández Cedrés, cuya actuación silenciosa pero consistente lo convirtió en uno de los pilares del equipo a lo largo del certamen.
Entre los momentos destacados, las victorias fuera de casa ante Lanús y Unión se erigen como los puntos más altos de la campaña, mientras que la derrota por goleada ante Racing y las derrotas ante Boca y Defensa y Justicia representaron los puntos más bajos.
En última instancia, la campaña de Newell's en la Copa de la Liga deja un sabor agridulce en la boca de los aficionados, quienes vieron cómo sus esperanzas se desvanecían gradualmente a medida que el equipo pasaba de la ilusión a la frustración. Sin embargo, queda la oportunidad de aprender de los errores y trabajar en la reconstrucción para futuros desafíos.
