En medio de una batalla en la provincia de Buenos Aires por la modificación de la ley de Bases, donde el territorio bonaerense es crucial, surge un conflicto en la industria del tabaco que pone en riesgo cientos de empleos.
La propuesta de modificar los impuestos internos al tabaco, presentada por el Ejecutivo, ha encontrado resistencia, especialmente entre los legisladores bonaerenses. Este conflicto ha llevado al presidente Javier Milei a referirse a "El Señor del Tabaco", identificado como Pablo Otero, dueño de la Tabacalera Sarandí.
Sin embargo, el foco se desplaza hacia Aníbal Pineda, un camarista federal de la Cámara de Rosario, cuyos fallos están bajo escrutinio de la Corte Nacional. Pineda ha sido vinculado a Otero y su tabacalera, lo que ha generado preocupación sobre posibles influencias en sus decisiones judiciales.
Los problemas judiciales han afectado directamente a empresas como Bronway, que se encuentra con su planta parada y más de 300 trabajadores suspendidos debido a decisiones de la Cámara Federal de Rosario. Mientras tanto, desde la Cámara Argentina Nacional de Empresas Tabacaleras (Canet), se denuncia el uso de medidas judiciales selectivas por parte de Otero para favorecer su empresa, mientras sus competidores enfrentan dificultades.
En este escenario, se destaca la necesidad de una revisión imparcial de las acciones judiciales y legislativas que puedan afectar el equilibrio del mercado del tabaco y la estabilidad laboral en la región.
