Las cámaras empresariales que representan a los productores de bioetanol han expresado su profundo descontento y preocupación ante las modificaciones introducidas al proyecto de ley de Biocombustibles, considerando que representan un "insólito retroceso" para el sector.
Este proyecto forma parte del paquete Ómnibus y ha generado un debate intenso sobre la dirección futura de la industria de biocombustibles en Argentina.
El proyecto, que originalmente contemplaba un aumento en el nivel de mezcla de bioetanol en las naftas, ahora propone mantenerlo en el 12% actual y establece precios máximos, desatando críticas y sospechas de posibles influencias por parte de las petroleras.
En un comunicado conjunto, el Centro Azucarero Argentino, la Cámara de Bioetanol de Maíz y la Cámara de Industrializadores de Granos y Productores de Biocombustibles en Origen calificaron estas modificaciones como "insólitas y contradictorias". Las cámaras pidieron a los diputados nacionales que respalden el proyecto original elaborado por las provincias de Córdoba, Tucumán, Salta, Jujuy, Entre Ríos y Santa Fe.
El comunicado destaca que estas modificaciones contradicen las recientes declaraciones del Secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, quien había anunciado un plan de crecimiento de las mezclas de bioetanol con las naftas. Las cámaras expresan su preocupación por la posible influencia de intereses ajenos al desarrollo del sector de biocombustibles en Argentina, sin mencionar directamente a las petroleras.
El sector privado, por primera vez, respalda una participación abierta y competitiva de todos los productores, incluyendo las petroleras. Las cámaras sostienen que el proyecto original propone un esquema de convergencia con el Mercosur, con un programa de crecimiento de la mezcla que oscila entre el 18% y el 27%, mediante licitaciones por precio y un mercado libre por encima de ese rango.
En un llamado a los diputados, las cámaras solicitan el respaldo a los dictámenes de minoría que reflejan la propuesta de los gobernadores, destacando su impacto positivo en el medio ambiente, el desarrollo federal y el empleo sostenible.
