La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha declarado admisible la petición presentada por el Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas (CECIM) La Plata para investigar las torturas sufridas por soldados argentinos durante el conflicto bélico de 1982. Esta decisión representa un avance significativo en la búsqueda de justicia para los excombatientes y sus familias, quienes han denunciado violaciones a los derechos humanos.
La investigación se centra en las torturas infligidas a los soldados argentinos durante la guerra de Malvinas, incluyendo actos como estaqueos prolongados y simulacros de fusilamientos por parte de sus superiores. El CECIM presentó la petición en mayo de 2015, argumentando que el Estado argentino violó los derechos humanos al demorarse injustificadamente en la investigación de estos crímenes.
La respuesta inicial del Estado argentino en febrero de 2019, durante la gestión de Mauricio Macri, indicó que la petición no debía ser admitida. Argumentaron que las torturas ocurrieron en 1982, antes de que Argentina ratificara la Convención Americana de Derechos Humanos. Además, afirmaron que algunas investigaciones sobre torturas en Malvinas aún estaban en curso.
La CIDH, en su informe de admisibilidad, recordó el contexto de dictadura militar en el que ocurrieron las torturas, destacando que durante ese período se cometieron graves violaciones a los derechos humanos en Argentina. Este recordatorio contrarresta los intentos de negar o justificar los crímenes de la dictadura, y subraya la gravedad de los hechos denunciados por los excombatientes.
El CECIM tendrá cuatro meses para proporcionar nueva información a la CIDH, plazo que puede prorrogarse por dos meses adicionales. Lo mismo se aplica al gobierno de Milei y Victoria Villarruel. Después de este período, la CIDH analizará la petición en profundidad y emitirá un pronunciamiento.
La decisión de la CIDH es recibida con satisfacción en el CECIM, que ve este avance como un paso hacia la justicia para aquellos soldados que sufrieron torturas en manos de un Estado genocida. La lucha por la verdad y la condena de los responsables continúa, y este reconocimiento por parte de la CIDH es considerado un paso significativo en la dirección correcta.