El avión en el que viajaba la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sufrió una interferencia del GPS durante su aproximación para aterrizar en Bulgaria el pasado domingo. Su equipo de prensa ha confirmado el incidente y la Comisión Europea sospecha que Rusia está detrás de lo ocurrido.
Según el diario británico "The Financial Times", la aeronave, un vuelo chárter, se vio obligada a utilizar herramientas de navegación terrestre e incluso mapas de papel para lograr el aterrizaje. A pesar del percance, el avión no tuvo que cambiar de ruta y aterrizó sin contratiempos en el aeropuerto internacional de Plovdiv, en el sur del país.
"Se investiga un sabotaje deliberado"
La portavoz de la Comisión, Arianna Podesta, declaró en una rueda de prensa en Bruselas que el incidente se debió a una "interferencia flagrante" de Moscú. Aunque la Comisión no pudo confirmar si el ataque al vuelo había sido deliberado, el gobierno búlgaro sí aseguró en un comunicado que "la señal satélite que transmitía información al sistema de navegación GPS del avión fue neutralizada".
Ursula von der Leyen, de 66 años, se encontraba en Bulgaria como parte de una gira que tiene como objetivo reforzar la "plena solidaridad" del bloque con los siete países de la Unión Europea que comparten fronteras o se encuentran cerca de Bielorrusia y Rusia. La Comisión Europea ha confirmado que esta región ha experimentado "muchas de estas actividades de interferencia y suplantación" y ha sancionado a diversas empresas presuntamente implicadas en los hechos.
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