A pesar de las reuniones semanales que buscan mostrar una relación cordial entre el presidente Javier Milei y el exmandatario Mauricio Macri, las tensiones entre el líder del PRO y el asesor presidencial Santiago Caputo continúan escalando, especialmente en el contexto de la reestructuración de la SIDE (Secretaría de Inteligencia del Estado).
Macri ha expresado su preocupación por lo que considera movimientos "inusuales" dentro del organismo de inteligencia, señalando que funcionarios cercanos a Caputo han solicitado a la Justicia Federal la revisión de cuatro causas judiciales en las que él está involucrado. Este hecho ha intensificado su malestar, llevándolo a instruir a Cristian Ritondo, titular de la bancada del PRO, a presentar un pedido formal para esclarecer las acciones de la SIDE bajo la dirección de Sergio Neiffer.
El malestar de Macri con Caputo es cada vez más evidente, manifestándolo públicamente en diversas oportunidades. Desde críticas al entorno libertario durante su discurso en La Boca, hasta la propuesta de candidatos para ocupar vacantes en el Gobierno, Macri intenta posicionarse dentro de la administración de Milei. Sin embargo, estos ataques no parecen afectar la relación cercana que Caputo mantiene con el presidente. Milei, quien lo recibe regularmente para discutir temas de interés común, ha mostrado lealtad hacia su asesor, lo que refleja la fuerte alianza entre ambos.
En medio de estas tensiones, desde la Casa Rosada niegan cualquier persecución dirigida desde la SIDE hacia Macri, aunque admiten que se han solicitado informes judiciales como parte de un proceso de revisión interna de agentes. Según fuentes cercanas, la revisión incluye todas las causas en las que están involucrados agentes de inteligencia, y la inclusión de los casos de Macri es solo una coincidencia debido a la naturaleza de sus causas pendientes.
El acercamiento constante de Macri a Milei es interpretado por algunos en Balcarce 50 como un intento de consolidar un acuerdo legislativo o de posicionar a sus aliados dentro del Gabinete. Mientras tanto, Milei, ajeno al conflicto, continúa manteniendo un equilibrio delicado: apoya a Caputo, destacando su alta capacidad, y al mismo tiempo, recibe a Macri en la residencia presidencial sin resentimientos, a pesar de las maniobras políticas del PRO en el Congreso.
Desde el círculo libertario, advierten sobre el riesgo de que cualquier intento de intercambio de apoyo legislativo por cargos gubernamentales podría tener un alto costo político, subrayando la delicadeza de la situación.