Este lunes, la discusión en la Cámara de Diputados sobre la controvertida Ley Ómnibus entra en una nueva fase.
José Luis Espert conduce la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados (Foto: NA).
A partir de las 10:00, la comisión encargada de analizar la normativa recibirá a más de 60 expositores de la sociedad civil, representantes de pymes, científicos, médicos, sindicalistas y miembros de cámaras pesqueras, entre otros.
La iniciativa de convocar a estos sectores afectados por la ley provino inicialmente de Unión por la Patria, pero ganó respaldo en diversas bancadas, incluyendo la UCR, la Coalición Cívica y parte del PRO. Sin embargo, la velocidad con la que el oficialismo busca avanzar en el proceso genera escepticismo entre sus opositores.
A pesar de ciertas concesiones por parte del Gobierno, persisten dudas en la profundidad de estas modificaciones. La ausencia de un interlocutor oficial que formalice los acuerdos alcanzados verbalmente genera incertidumbre entre los diputados. Por ejemplo, la subsecretaria de Ambiente, Ana Lamas, anunció la reversión de la posibilidad de desmontar bosques nativos en áreas protegidas, pero esta medida aún no se ha oficializado en la ley.
El oficialismo, consciente de la necesidad de negociar para obtener los 129 votos requeridos, busca acuerdos, pero aún no se han oficializado muchas de estas discusiones. Martín Menem, titular de Diputados, ha estado trabajando en posibles acuerdos y recibiendo solicitudes de modificaciones, pero la oficialización está pendiente.
Entre los puntos de discordia se encuentran la emergencia pública y la amplia delegación de facultades legislativas al Presidente por cuatro años, la reforma electoral, la suba de retenciones, la suspensión de la fórmula de movilidad jubilatoria, y la privatización de empresas por decisión del Ejecutivo.
La oposición, incluso dentro de bloques dialoguistas, manifiesta preocupación y busca limitar ciertos aspectos de la propuesta gubernamental. En este tenso contexto, el Gobierno confía en tener el dictamen esta semana, pero desde la oposición advierten que puede ser un objetivo demasiado optimista.