La Dirección General de Aduanas ha impuesto cuantiosas multas a las empresas Vicentin S.A y Cofco, acusadas de sobrefacturar importaciones para obtener mayores divisas del Banco Central. Esta acción se enmarca en una investigación por fuga de divisas, que contó con la ratificación de Paraguay, país proveedor de granos. Las cámaras exportadoras, que alegaron que la Aduana inventó la investigación, han sido desestimadas por la documentación presentada.
Guillermo Michel, titular de la Dirección General de Aduanas, afirmó que la entidad actuó conforme a la normativa y al intercambio internacional de información. Las multas aplicadas ascienden a $446.368.298 para Vicentin S.A. y $52.278.729 para Cofco Int. Arg SA.
Desde la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) alegaron que la Aduana está inventando investigaciones contra empresas exportadoras. Además, señalaron el momento inoportuno del anuncio y su impacto en las actividades económicas.
La investigación, que se inició en 2020, reveló la importación de mercadería desde Paraguay con refacturaciones de intermediarios en otros países. Estas maniobras inflaban el valor de la operación en Argentina en comparación con el registrado en Paraguay. Más de 3.000 operaciones están bajo análisis, y se estima que el propósito era fugar divisas al exterior.
Gustavo García Zanotti, economista e investigador de la UNR, explicó que las empresas abrieron filiales en Paraguay para comercializar hacia Argentina, facilitando operaciones intrafirma y evasión fiscal. Las siete firmas investigadas incluyen Aceitera General Deheza, Bunge Argentina, Cargill SA, Cofco International, LDC Argentina SA, Molinos Agro SA y Viterra Argentina SA (vinculada a Vicentin).
Estas prácticas tienen como efecto el ahuecamiento de la base imponible en Argentina y la fuga indebida de divisas, poniendo en entredicho la conducta ética y legal de las empresas involucradas.
